El alzhéimer se diagnostica en personas cada vez más jóvenes

Los enfermos de alzhéimer cada vez son más jóvenes y un 4% de la población española de entre 65 y 74 años de edad padece la enfermedad. Son los principales datos de un estudio realizado a nivel europeo por la prestigiosa publicación británica The Lancet y presentados ayer en el V Encuentro sobre la Enfermedad de Alzhéimer. Según la misma investigación, en el tramo de edad de entre los 75 y 84 años, el 12% de la población sufre este trastorno y en personas de más de 85 años la cifra se eleva a un 20%.

Como explicó Basilio Bernal, subdirector gerente del hospital Juan Ramón Jiménez e Infanta Elena, el alzhéimer es una enfermedad propia de los países desarrollados, debido a que está asociada a la mejora en la esperanza de vida. En este aspecto, los españoles vamos a la cabeza, superados únicamente por Japón, de ahí que en nuestro país esta afección sea un problema de suma importancia y en la que se han invertido y se invierten horas de estudio e investigaciones para hacer más llevadera la vida de las personas que la sufren y de sus más allegados.

La Federación de Asociaciones de Familiares de Enfermos de Alzhéimer y Otras Demencias de Huelva y el Hospital Infanta Elena son un buen ejemplo de ello. Por quinto año consecutivo celebraron ayer esta jornada dirigida al personal sanitario, cuidadores, técnicos y directivos de asociaciones. El título elegido fue Diagnóstico Alzhéimer ¿y ahora qué? y trató en profundidad la primera fase del trastorno.

La mesa redonda fue inaugurada por la delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Lourdes Martín, y en ella participaron el fiscal jefe de la audiencia provincial de Huelva, Jesús Jiménez Soria; una de las psicólogas de la Federación de Asociaciones, Eva Rodríguez Márquez, y un médico dedicado a cuidados paliativos, Tomás Camacho Pizarro.

Los tres ponentes contaron sus experiencias, orientadas a enfocar el inicio del trastorno de una manera diferente. Recordaron que, poco a poco, el enfermo va perdiendo todas sus capacidades y las tiene que ir cediendo a otra persona, ahí entra en juego la importante figura de quienes se hacen cargo de tomar decisiones por los pacientes. Al diagnosticar la dolencia a tiempo, se permite que sea el propio afectado el que disponga quién va a hacerse cargo de ello. Los ponentes aclararon cuáles son las implicaciones legales, emocionales y éticas de dicho requerimiento a los asistentes, entre los que se encontraban familiares de enfermos de alzhéimer.

Para finalizar, se expusieron una serie de testimonios, tanto de afectados por la enfermedad en su fase inicial que describieron cómo han tenido que adaptar sus vidas para convivir con ella, como de cuidadores que han tratado a pacientes en situaciones familiares delicadas y que manifestaron la importancia de mantener un buen entorno para que el alzhéimer sea menos severo.