Los Pollos montan su spa

Con una de piratas comenzó la tercera sesión del Concurso de Agrupaciones del Carnaval Colombino. Una tanda de coplas a cargo de los bucaneros de la comparsa mixta Donde nos lleve el viento, de las Cabezas de San Juan (Sevilla), una joven agrupación -sus integrantes tienen una media de edad de 24 años- dirigida por Enrique Maestre, autor de música y letras.

En su primer pasodoble abordaron la falta de salidas laborales para el colectivo juvenil, que se ve obligado a irse al extranjero para labrarse un futuro. "España es un país que no valora lo suyo y deja marcharse a los que son su futuro", indicaron los componentes de esta murga, que subrayaron que "se ahoga una generación entera".

En su segundo pasodoble tuvieron letras de condena para la sentencia del Tribunal de Estrasburgo que anuló la doctrina Parot y permitió la excarcelación de etarras, una decisión que impide a las víctimas poder "cerrar sus heridas".

Tras los corsarios, le tocó el turno a uno de los dos cuartetos que concursarán en la presente edición del certamen, El golpe, de Los Palacios y Villafranca (Sevilla). Tal y como indica el nombre de la agrupación, la historia va de ladrones de banco. En la parodia, dos inexperimentados cacos entran en una entidad bancaria cuando una pareja va a abrir una cartilla para su hijo.

Uno de los cuplés del cuarteto, dirigido por Juan Manuel Amuedo, fue para el futbolista del Real Madrid, Cristiano Ronaldo, que "por fin ha vuelto a recuperar su balón de oro", destacando el momento emotivo que se vivió en la gala de entrega del galardón, en Zúrich.

En el popurrí hubo alusiones a la subida de la gasolina, la luz y el tabaco; los recortes del Gobierno de Mariano Rajoy en educación, cultura y sanidad; los libros de Belén Esteban, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero; la imputación de la Infanta Cristina; el embarazo de la hija de Isabel Pantoja y el caso del Nido.

La tercera en subir a escena fue La chirigota más mala de la historia, de Sevilla, dirigida por Pablo Martínez, una murga cuyos integrantes van disfrazados de personajes como Gadafi, Saddam Hussein, Bin Laden, Mussolini, Franco, Videla, Al Capone, Mao Tse Tung, Stalin, Hitler y Pinochet, reunidos todos en un oscuro cementerio, en el que el enterrador tiene la voz cantante. Un camposanto, en el que reposan bajo tierra el empleo y la educación.

En sus letras mostraron su rechazo a la reforma de la Ley del Aborto, abogando porque sea la mujer la que decida que hacer con su embarazo.

Por su parte, los jóvenes componentes de la comparsa Los Druidas, de Sevilla, repartieron su pócima mágica de Carnaval aderezada con duras letras dirigidas al Tribunal de Estrasburgo, que liberó, "con la excusa de defender los Derechos Humanos", a "todos los criminales que nos condenaron a un mar de sangre", y a la justicia española, por los casos de Miguel Carcaño y José Bretón, condenados por el asesinato de Marta de Castillo, el primero, y de los pequeños Ruth y José, el segundo, ya que consideran leve la condena impuesta en relación al delito cometido.

Los integrantes de la comparsa, dirigida por Oscar Rafael Torrero, se metieron en su papel de druidas y realizaron un hechizo lleno de carnavales, instando al público a sentirse orgulloso de ser carnavalero y llevarlo por bandera.

A continuación hubo una sesión de hidroterapia con la murga El Carnaval spa relajarse, de la peña Los Pollos, de Huelva, en la que no faltó el doble de Falete en su versión carnavalera de Splash! Famosos al agua, que aseguró estar "más relajado que Jesuli este año". Con esta agrupación, dirigida por Manuel Tirado, hubo generosas dosis de risas en el Gran Teatro. Buenos golpes de humor de unos murguistas que se lo pasaron bien encima del escenario y lo transmitieron.

El primero de sus pasodobles se lo dedicaron a Huelva, destacando cada uno de sus festejos, lo que aprovecharon para criticar a los carnavaleros que abandonan su fiesta. "Los golpes en el pecho a mí no me valen".

El segundo pasodoble fue para Manuel Cordero, insignia de oro del Carnaval Colombino 2014, fallecido el pasado mes de octubre. "Amigo esta copla te la debía". Resaltaron que dio "una lección de vida y de muerte", a lo que añadieron que "aquí te echamos de menos, cuando lleguemos a tu vera haremos una comparsa". Los homenajes a Manuel Cordero se suceden estos días de concurso sobre las tablas del Gran Teatro.

El popurrí fue un canto a Huelva en el que destacaron, metidos en el tipo, las propiedades terapéuticas de distintos lugares de la ciudad.

Cerró la velada carnavalera la comparsa Los cepillahuesos, de Punta Umbría. Los componentes de la agrupación transportaron al público a Egipto, al año 1922, cuando el egiptólogo Howard Carter descubrió la tumba de Tutankamón en el valle de los Reyes. Emulando al arqueólogo, la expedición, dirigida por David Galloso, descubrió el Carnaval y sintió la necesidad "de sentir ese extraño compás".

En su segundo pasodoble, la comparsa puntaumbrieña mostró su apoyo al Carnaval Colombino, que año a año va perdiendo agrupaciones locales, e indicó que ayudará a levantarlo "aunque me cueste la misma vida".