El duque de Montpensier fue valedor del Monasterio de la Rábida

Una exposición en el Archivo Histórico de Moguer revela los viajes que Antonio de Orleans realizó al convento en 1858, siendo clave para su declaración de Monumento Nacional en 1860

Vista aérea del Monasterio de la Rábida, situado en el término municipal de Palos de la Frontera.
Vista aérea del Monasterio de la Rábida, situado en el término municipal de Palos de la Frontera.
Efe Huelva

10 de junio 2015 - 05:00

Antonio de Orleans, duque de Montpensier, fue allá por la mitad del siglo XIX uno de los principales valedores de la importancia del Monasterio de La Rábida, como exponente del patrimonio americanista en España, siendo su actuación clave para que fuera declarado Monumento Nacional en 1860.

Esta faceta del duque es posible conocerla este mes en el Archivo Histórico de Moguer, donde se exponen una serie escritos y fotografías, que se custodian en esta institución y que revelan los dos viajes que éste realizó al monasterio rabideño en 1858.

Durante la presentación de la muestra, el director del Archivo, Diego Ropero, explicó que el primer viaje lo realizó junto a su mujer, Luisa Fernanda de Borbón, los días 9, 10 y 11 de marzo, y su madre, la reina Amelia de Borbón-Dos Sicilias, viuda del rey Luis Felipe de Orleans, rey de Francia.

La regia comitiva, cuyo objetivo era visitar el Monasterio de La Rábida que estaba deteriorándose y siendo objeto de numerosos destrozos, se hospedó en Moguer, lo que provocó no pocos quebraderos de cabeza tanto al propio Ayuntamiento como a algunos de los vecinos más importantes de la ciudad, que deseaban estar a la altura de tan ilustres visitantes.

Los documentos que se muestran dan cuenta precisamente de esa estancia de los Montpensier en Moguer y de la que posteriormente realizaría en solitario el duque Antonio de Orleans el día 5 de junio, para volver a comprobar el estado del monasterio.

Reproducciones digitales de los acuerdos de pleno adoptados por el Consistorio moguereño en relación con estas visitas, así como fotografías de los duques y de la reina Amelia de Borbón, además de una medalla conmemorativa que reproduce el estado de conservación del convento rabideño en el siglo XIX, pueden verse en la muestra.

Recordó Ropero que desde 1836, fecha en que el recinto rabideño fue sacado a subasta en cumplimiento de la Ley de Desamortización, quedando desierta su puja, el convento sufrió actos vandálicos que saquearon el interior provocando su deterioro, hasta que en 1851 el ministro Fermín Arteta ordenó el derribo del edificio colombino, algo que pudo ser paralizado por Mariano Alonso y Castillo, gobernador de Huelva entre 1851 y 1853.

Las visitas de los Montpensier y el interés mostrado por el duque influyeron decisivamente para que el Gobierno lo declarara en 1860 Monumento Nacional, llegando a colaborar financieramente el propio Antonio de Orleans en la recuperación del convento de la Rábida, lo que hizo posible, no solo que éste no desapareciese, sino que fuese recuperando su aspecto original.

stats