El poeta lepero Adrián González da Costa gana el Premio Gerardo Diego

El poemario de sonetos titulado Blanco en lo blanco, del lepero Adrián González da Costa (1979), se alzó ayer con el Premio Internacional de Poesía Gerardo Diego que concede la Comunidad de Cantabria, mientras que un thriller sobre la muerte de Larra del bilbaíno, residente en Salamanca, José Javier Muñoz, ganó el Premio de Novela 2015 José María de Pereda y Desórdenes, del madrileño Pablo Escudero se alzó con el de Cuentos Manuel Llano.

El fallo de estos premios literarios se anunció ayer en una rueda de prensa del consejero de Educación, Cultura y Deporte, Ramón Ruiz, y miembros del jurado, quienes destacaron la unanimidad alcanzada a la hora de decidir los ganadores de los premios, si bien donde hubo más discusión fue en la categoría de Cuentos.

De Blanco en lo blanco, obra ganadora del Premio de Poesía, el jurado explicó que se trata de una colección de sonetos en los que el autor demuestra una "riqueza imaginativa verdaderamente sorprendente".

Su autor, Adrián González da Costa, licenciado en Filología por la Universidad de Sevilla, es en la actualidad profesor de Lengua Castellana y Literatura en el IES Abula de Vilches (Jaén). En 2002 fue ganador del Premio Adonais de Poesía y del Ópera Prima de la crítica andaluza con la obra Rua dos douradores y en 2012 logró el Premio de Poesía de la Universidad de Sevilla.

Como traductor, ha realizado varios trabajos, entre los que destacan los publicados en la colección Conversaciones con fotógrafos de la editorial La fábrica: Helena Almeida habla con Isabel de Carlos y Jorge Molder habla con Jose Augusto Bragança.

La mayoría de los poemas de su primer y segundo libro se encuentran traducidos al griego y publicados por la traductora y fotógrafa artística Virginia Chormoviti tanto en la revista internacional www.levurelitteraire.com como en la europea www.e-poema.eu.

Adrián González confiesa, entre otros, su vínculo con Juan Ramón Jiménez, sobre todo el de Animal de fondo, En el otro costado,Diario de un poeta recién casado, con su verso libre y su prosa poética, o Dios deseado y deseante, cuyos sonetos estudió con especial dedicación. Éste fue el poeta del que el vate lepero quiso aprender: "El ritmo, el pulso del verso, de la prosa suave o enfebrecida, la emoción hecha palabra, imagen: la fealdad del túnel ciudadano, con su interminable intestino retorcido; la casa colonial dormida como un perro junto al río..."

Con respecto Al premio de Novela, el jurado tuvo decidido "desde el principio", según reconocieron algunos de sus integrantes, que era para ¿Quién mató a Larra?, de José Javier Muñoz. Se trata de un thriller que se desarrolla en el siglo XIX en España y que parte de que el escritor y periodista Mariano José Larra, uno de los mayores representantes del Romanticismo español, en lugar de suicidarse murió asesinado.

La trama consiste en las pesquisas de un investigador sobre ese presunto asesinato y los distintos sospechosos que se barajan y, aunque es ficción, se mezcla con personajes reales y está, según el jurado, "impecablemente ambientada.

José Javier Muñoz, el autor, es licenciado en Periodismo y ha sido el autor principal de una veintena de obra, varias de ellas relacionadas con esta profesión, pero también de otras novelas, como La baraja del duque de Otranto, El anzuelo de Bagdad, La caja de música y el filólogo asesinado y 'Un dedo, diez letras'. Ha ganado varios premios literarios, tanto de ensayo, como de novela.

De Desórdenes, la obra ganadora de la decimoctava edición del Premio de Cuentos Manuel Llano, el jurado opinó que tiene "mucha calidad" y destacó la capacidad de su autor para realizar en ella, "al mismo tiempo", una reflexión irónica" sobre el ejercicio de escribir y contar "historias que intereses al lector".

Pablo Escudero, el autor de esta obra, es licenciado en Ciencias Físicas y es profesor de Matemáticas en Secundaria y en Bachillerato, pero desde hace diez años escribe con regularidad, sobre todo relatos, y también alguna novela corta. En 2015 ha visto publicado su primer libro de relatos, titulado como conjunto Beber durante el embarazo.