Miles de personas reclaman en la calle agua para el Condado

La Plataforma en Defensa de los Regadíos volvió a reclamar ayer seguridad jurídica para sus cultivos en otra manifestación histórica. Al respaldo de las cifras de un sector básico para la provincia de Huelva se sumó el respaldo de miles de personas (30.000 personas, según cifras de la organización, y 11.000, según la Subdelegación del Gobierno) que recorrieron las calles del centro de Huelva para reivindicar una vez más el trasvase al Condado que le permita consolidar sus cultivos sin problemas legales.

Los agricultores escenificaron la necesidad de que se regule una actividad económica con más de tres décadas a sus espaldas y que sigue "acechada" por las actividad de la Fiscalía que, a instancias de Europa, exige el cierre de los pozos existentes en la comarca de Doñana por adolecer de un respaldo legal que les dé cobertura a la espera de la llegada del agua superficial.

El sector volvió a ser un piña al recabar no sólo el respaldo institucional de los alcaldes de los municipios afectados (Almonte, Rociana, Moguer, Bonares, Lucena) índependientemente de su color político, sino que en esta ocasión contó con las adhesiones de sus homólogos de Niebla, Bollullos, Cartaya o San Juan del Puerto que sumaron sus apoyos a un sector que está detrás de cuatro de cada cinco empleos en la comarca, según los datos de los agricultores. Un sector capaz de facturar 500 millones de euros al año, destacaban.

La marcha, iniciada desde los aledaños del Estadio Nuevo Colombino, finalizó en la Gran Vía, a las puertas de la subdelegación del Gobierno, donde la Plataforma reiteró sus peticiones: la aprobación de un nuevo trasvase de 15 hectómetros cúbicos (que se sumen a los 4,9 ya aprobados en Consejo de Ministros), lo que acto seguido permitiría a la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) la autorización en precario del uso de los pozos hasta que materializar la llegada de este agua. Sin embargo, tanto el presidente de la plantaforma, Cristóbal Picón, como los líderes políticos evitaron reconocer que con esta aportación únicamente podrán beneficiarse las 9.340 hectáreas reconocidas en el Plan Especial de Regadíos de la Corona Norte de Doñana, recientemente aprobado por la Junta de Andalucía, dejando fuera todas aquellas hectáreas constituidas a posteriori del Plan de Ordenación Territorial del Ámbito de Doñana (Potad) del 2004, cuando se ponía techo a la superficie de riego en la zona.

Publicación de Huelva Información.

Picón reiteró que los agricultores son los primeros interesados en mantener el idilio con Doñana, compatibilizando la producción agrícola con el respeto por los recursos del acuífero 27 que sirve de sustento a la Reserva de la Biosfera. Ello pasa por disponer de los recursos superficiales que sustituyan las extracciones, recordó, garantizando de un lado el agua para los agricultores y por otro el mantenimiento de todo el ecosistema de la joya medioambiental de Europa. Esta es la línea en la que han venido trabajando, añadió, como demuestra el hecho de que "más del 80% de los cultivos se encuentran en producción integrada y más del 40% es producción ecológica, mientras que se aplican técnicas que permiten el riego localizado, nocturno y gota a gota".

Una vez finalizada la marcha a las puertas de la Subdelegación su titular, Enrique Pérez Viguera, recibió a los líderes de la Plataforma y les reiteró su "compromiso" de continuar buscando fórmulas que permitan brindar la seguridad jurídica que con vehemencia demanda el sector. Fiel a este discurso dio traslado al Ministerio de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de unas demandas que contaban con el aval de la marea humana que les secundaba.

Fuentes de la Subdelegación recordaron que desde el Ejecutivo de Mariano Rajoy se ha puesto en marcha todo el proyecto para la consolidación de los regadíos y para el uso de los 4,9 hectómetros cúbicos, primeramente, aprobando la Declaración de Impacto Ambiental y, posteriormente, dotando financieramente el proyecto de mejora y consolidación de los regadíos, que incluía la construcción de una subestación eléctrica para abastecer de suministro a las estaciones de bombeo y superar la orografía del terreno, impulsado así este caudal hasta la balsa de Lucena del Puerto, así como la red principal y secundaria de distribución , con sistemas de automatización y telecontrol. Obras que cuentan con un presupuesto de 20.570.000 euros y cuyas canalizaciones también permitirán llevar el agua de futuras trasferencias. En consecuencia, afirmaron "nadie puede acusar de inmovilismo al Gobierno Central, en contraposición con la etapa del 2008 al 2011, cuando hubo ningún avance al proyecto".