El fiscal reprocha al ex director de la Faffe que gastara 32.556 euros de fondos públicos "en prostitutas" y "orgías"

Duro alegato inicial de la Fiscalía Anticorrupción al inicio del juicio por el uso de las tarjetas de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe). El fiscal delegado de Anticorrupción Fernando Soto ha reprochado al principal acusado, el ex director de la Faffe Fernando Villén, que se gastara 32.556 euros "en prostitutas" y "orgías".

Al inicio de su alegato ante el jurado popular en la Audiencia de Sevilla, el fiscal ha recordado que no es habitual que un caso como éste sea sometido al dictamen de un tribunal del jurado, pero ha señalado que se trata de "un asunto de corrupción sencillo" y, en este sentido, ha resumido el juicio explicando que Fernando Villén era el director de la Faffe y como tal acudió en una decena de ocasiones a "puticlubs" en los que realizó un gasto total de 32.556 euros en 43 pagos, en "festivales, orgías, llámenlo como quiera, pero fue un gasto en prostitutas", ha aseverado.

El fiscal distingue una segunda fase de los hechos en la que involucra a la segunda acusada, la ex directora económico-financiera de la Faffe Ana Valls, al considerar que entre ambos "crearon un sistema para hacernos creer que se devolvió el dinero" y así lograron ocultarlo "hasta que llegó la Guardia Civil", ha afirmado el fiscal, en alusión a la investigación realizada por la Unidad Central Operativa (UCO) del instituto armado.

"Una gran juerga u orgía"

Fernando Soto ha añadido que hasta "diez veces" acudió Fernando Villén a clubes de alterne de Sevilla, Cádiz y Córdoba, donde se gasto esos 32.556 euros, destacando que "en una noche", la que va del 22 al 23 de marzo de 2010 pagó un total de 14.737 euros y apuntando al jurado que se trata de un dinero del año 2010, por lo que ese gasto tuvo que ser realizado "acompañado de muchas personas y organizando una fiesta". "Esa gran juerga u orgía fue de tal calibre que al día siguiente Villén inventó que le habían robado la tarjeta y que algún desaprensivo se había gastado esos 14.000 euros en el Don Angelo", ha afirmado el fiscal, que ha precisado que en cualquier caso "no se atrevieron a denunciarlo a la Policía, sino que al día siguiente, como si fuera "una película", se pagó en metálico enviando al chófer de la Faffe con un sobre para abonarle estos 15 cargos realizados la noche anterior con la tarjeta.

Y "casualmente ese mismo día" la directora financiera firma dos cheques por importe de 6.300 euros, que se cobraron "y no hemos vuelto a saber nada del dinero".

El fiscal ha lamentado que a pesar de la investigación "no hemos podido saber con quién fue el acusado, qué festejaban, pero seguro que solo no fue, no sabemos si fue acompañado de altos cargos, políticos o empresarios".

De los "enchufes" de la Faffe y su integración en el SAE

El Ministerio Público ha insistido en que entre ambos acusados organizaron un sistema para ocultar esos pagos y hacernos creer que Villén devolvía el dinero" y ha finalizado su intervención recordado que la utilización de las tarjetas en los prostíbulos se descubrió mientras se investigaban los "enchufes" de los trabajadores de la Faffe, recordando que todos el personal de la fundación fue finalmente integrado en el Servicio Andaluz de Empleo "sin oposición ni nada".

La acusación popular que ejerce el PP en este juicio, representado por el abogado Ángel Márquez, ha coincidido con el fiscal en que este asunto cabe calificarlo como un "acto de corrupción" que fue detectado por la Guardia Civil.

En la primera sesión del juicio también se han presentado las alegaciones previas por parte de las defensas. Así, el abogado Adolfo Cuéllar, que defiende a Fernando Villén, ha recordado al jurado que los dos acusados son "inocentes a día de hoy" y son las acusaciones las que tienen que acreditar con una prueba "válida y suficiente" que las acusaciones "no son meras conjeturas".

Nada de sexo y prostitución, "no es un juicio moral"

En este juicio, ha continuado Cuéllar, no se va a tratar "nada de la prostitución, el sexo, lo que se hizo o se dejó de hacer en esos locales", porque lo único que consta en las actuaciones es que se ha dispuesto d una tarjeta de crédito "en locales abiertos al públicos, locales legales, en los que cualquier ciudadano o ciudadano podía entrar, no había ninguna restricción".

El letrado ha indicado que aunque el "morbo" del caso es relevante, lo que debe valorar el jurado es si se realizaron gastos indebidos ajenos a la finalidad de la institución y si hubo un montaje para ocultarlo pero "no estamos en un juicio moral", y lo que debe determinarse es si tras haber efectuado esos gastos "moralmente deplorables" el dinero se devolvió íntegramente, que es la tesis defensiva.

Por su parte, el abogado Manuel Salinero, que representa a la directora económico-financiera Ana Valls, ha insistido en la inocencia de su defendida, que igualmente "deplora y reprocha que se hayan hecho esos gastos en clubes de alterne", pero ella es ajena a los mismos y "se ha enterado" de los cargos en los burdeles a través de este procedimiento judicial.

Salinero ha añadido que Ana Valls "nunca" ha tenido tarjeta de la Faffe y "no tenía que dar cobertura" al otro acusado, porque éste era "sólo su jefe y nunca ha visto recibos referentes a clubes de alterne", y ha recordado que dos de los gastos cuestionados -una comida en la Feria de Abril para los empleados y un viaje a Cuba- son reales. "Ana Valls no ha actuado en connivencia con Villén ni con ánimo de lucro, y no tiene más relación con él que era su jefe", ha añadido el letrado, que ha destacado que es una "persona intachable" que se dedicaba a realizar su trabajo con las finanzas de la Faffe.