¿Qué significa regalar bombones para San Valentín?
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Todos los días debería ser el día de San Valentín o el día de los enamorados y no solo una vez al año. Porque un momento como este se convierte en una cita ineludible en el calendario para todas esas personas, y parejas en general, que desean manifestar su amor de un modo diferente y original. Entre las muchas tradiciones que se asocian a esta fecha, regalar bombones es una de las prácticas más comunes. Pero además de ser un regalo delicioso, tiene un fuerte simbolismo y una historia que también es de lo más rica. ¿Quieres saber un poco sobre todo ello?
Un lenguaje muy dulce para declarar tu amor
Regalar bombones para San Valentín es una de las tradiciones más dulces que pueden existir. Porque no solo se convierte en un postre delicioso para el paladar sino que además representan el lenguaje universal del amor. Por lo que la conexión entre quien los recibe y quien los regala es única. El dulce del chocolate simboliza la alegría y el placer que la relación tiene en la vida de cada uno de los protagonistas. Sin olvidarnos de que, la mayoría de los bombones, suelen venir empaquetados con diferentes embalajes, cajas con formas de corazón o bien, con colores y detalles llamativos donde el color rojo suele ser el gran protagonista. Esto hace que se demuestre un buen gusto por los detalles, haciendo que los sentidos vuelvan a activarse al ver dicho presente. En algunas culturas antiguas como la aztca o la maya, el cacao se consideraba un ingrediente sagrado. Por lo que, tan solo se usaba en ocasiones especiales. Aunque hoy en día lo tenemos muy presente, sí es cierto que se mantiene para esos momentos en los que queremos sorprender y es que, al regalar bombones, las tradiciones ancestrales vuelven a estar presentes, ofreciendo un significado casi místico a un momento como este.
El simbolismo del chocolate en la historia
Fue en el siglo XVII cuando el chocolate era sinónimo de lujo. De manera que tan solo estaba asociado a todas las personas de la aristocracia. Ya por aquel entonces regalar chocolate era algo totalmente exclusivo y destinado a las ocasiones más importantes y especiales. Con el tiempo, se volvió asequible para todo el mundo pero es cierto que sí se mantiene esa tradición arraigada de que esté presente a la hora de cualquier celebración. Hay que decir que su connotación como un regalo emocional ha permanecido intacta a lo largo de los años. Pero si hablamos de San Valentín, no fue hasta el siglo XIX cuando las cajas de bombones ya eran todo un hecho, diseñadas para hacer el regalo más dulce pero también el más romántico. Un gesto clásico, que todavía hoy, emociona a todo aquel que lo recibe.
El mensaje que se esconde detrás del regalo
Todo los regalos que hacemos, o nos hacen, tienen un mensaje que expresar. En el caso de regalar bombones para San Valentín, los sentimientos más profundos serán una de las partes esenciales en forma de mensaje. Claro que no solo el hecho del regalo lleva mensaje, porque, ¿qué hay del envoltorio? También puede decir mucho más de lo que imaginamos. Por ejemplo, si quieres regalar unos bombones artesanales envueltos en un papel lleno de color, estarás ofreciendo un detalle único y especial que se sale de lo más habitual. Mientras que si optas por una selección de chocolates con sabores variados, nos acercamos más a interpretarlo como un momento de compartir experiencias nuevas.
Una vez que tengas el regalo en tus manos, la decisión de compartirlo o no ya es tuya. Pero si lo haces, te diremos que estás incentivando ese momento de conexión con la otra persona, disfrutando y creando nuevos recuerdos. De manera que los bombones son mucho más que un regalo, se posicionan como un medio perfecto para fortalecer los lazos afectivos.
Regalar bombones en San Valentín: la psicología del chocolate
Si estás pensando en regalar bombones para San Valentín, entonces tienes que saber que el chocolate tiene un impacto muy positivo en el estado de ánimo. Por lo que, la persona que lo recibe lo hará con toda una sonrisa. Al comer chocolate se liberan endorfinas y también, aumenta la serotonina. Es decir que las hormonas de la felicidad se activan de una manera rápida, generando una sensación de bienestar. Por si lo estabas pensando, te diremos que hacer un regalo como este no solo va a transmitir el cariño o el amor que sientes por otra persona, sino que además, le harás el día mucho más feliz. Si los bombones son de chocolate negro, tendrán más antioxidantes y esto hace que se cuide más y mejor de la salud cardiovascular.
Una tradición que perdura pero que también evoluciona
Las tradiciones nos siguen acompañando generación a generación y eso hace que puedan ir evolucionando poco a poco. Algo que no es malo, sino todo lo contrario, ya que en el caso de un regalo dulce como el que hoy nos ocupa, se puede combinar con más detalles para hacerlo único. Puedes añadir flores e incluso alguna joya, ya que ambas opciones son perfectas para crear un regalo personalizado y completo. A pesar de todo esto, hay que mencionar que los bombones son los grandes protagonistas del momento gracias a su simbolismo y su capacidad para deleitar tanto el paladar como el corazón de quien los recibe.
Tal y como hemos mencionado, regalar bombones es mucho más que ese simple gesto. Es una manera de expresar el amor, el cariño o el aprecio de una forma muy dulce. Desde su papel de alimento sagrado hasta ser el postre perfecto hoy en día, los bombones han demostrado ser un regalo donde el simbolismo y las emociones están presentes. Siendo una idea perfecta para celebrar el amor pero también para crear o reforzar momentos inolvidables. ¡Una vida sin chocolate no sería la misma!