Soler confía en recuperar al Mallorca

El ex futbolista Miguel Nanu Soler afirmó ayer en su presentación como nuevo entrenador del Mallorca en sustitución de Valery Karpin -despedido tras la derrota ante el Leganés en Son Moix (0-2)- que la plantilla que ahora dirigirá "tiene un margen importante de mejora".

"Hay que cambiar los pensamientos negativos y elevar el potencial, y eso se consigue con la mente y el trabajo inducido en los entrenamientos", explicó Soler, que conoce a la mayoría de los integrantes de la plantilla ya que dirigió en la pretemporada, hasta que fue sustituido de forma sorprendente, precisamente, por Valery Karpin.

"Los jugadores, con alguna excepción, están un 70% por debajo de sus posibilidades, esa es una realidad, y la pregunta es dónde está el 30% restante, que no manifiestan en el campo: yo diría que está en sus cabezas", señaló el nuevo entrenador mallorquinista, que debutará en el banquillo en el campo del Recreativo de Huelva.

Soler confirmado, asimismo, que retirará la denuncia por el impago de su ficha que interpuso contra el Mallorca el pasado verano, y mostró su solidaridad con Karpin. "Lamento lo que le ha ocurrido. Un despido es una situación muy amarga para la persona que lo vive, y también lo es para que el que tiene que ejecutar esa decisión, en este caso Miguel Ángel (Nadal)", indicó.

Dijo también que en su primera charla con la plantilla mallorquinista le ha trasmitido la necesidad de "creer en sí mismos, no lamentarse, y trabajar por alcanzar los objetivos previstos inicialmente".

Por su parte, el propietario y presidente del Mallorca, Utz Claassen, explicó en la presentación de Soler que la decisión de destituir a Karpin se tomó el domingo por la noche tras la derrota ante el Leganés en Son Moix.

"Convoqué al consejo de administración y al director deportivo, y por unanimidad acordamos que el técnico más capacitado para sacarnos de esta situación (el equipo está a tres puntos del descenso) era MIguel Soler", señaló Utz Claassen, quien agradeció al nuevo entrenador que aceptara el cargo "después de que el club no le hubiese tratado bien", subrayó Utz Claassen.