Sólo queda tocar madera

Sólo queda tocar madera. El infortunio se está cebando con la plantilla del Recreativo de Huelva, que no ha comenzado la temporada con buen pie. El equipo albiazul ha encadenado tres derrotas consecutivas: dos en la Liga (frente al Elche y el Betis) y otra en la Copa del Rey, siendo eliminado por la Ponferradina Leonesa.

La plaga de lesiones que asola al plantel albiazul está creando muchos problemas al técnico, Pablo Alfaro, que está viendo cómo semana a semana se incrementa el número de pacientes en la enfermería.

Un trébol de cuatro hojas, una herradura clavada en una puerta o una pata de conejo son algunos de los amuletos que utilizan los supersticiosos para alejar la mala suerte. El Decano quizá empiece a pensar en utilizar algún talismán para atraer la buena fortuna, dado que prácticamente un tercio de su plantilla -ya de por sí corta- está en el dique seco. Lamentablemente todas las líneas se han visto afectadas, desde el tercer portero, el canterano Ángel, que se perdió buena parte de la preparación de pretemporada, pasando por la defensa, el centro del campo y la delantera.

Poli, que sigue recuperándose de una intervención quirúrgica tras romperse el ligamento cruzado de su rodilla, lleva lesionado desde la temporada pasada. Pero es que para el partido del próximo domingo en Valladolid (Nuevo Zorilla, 12:00) hay otros muchos futbolistas que son baja segura, la gran mayoría por problemas musculares: Aarón, por una sobrecarga en el abductor; Raúl Cámara, por una rotura fibrilar en el recto anterior de la pierna derecha; Fidel, por una rotura de fibras en el pectinio; Dani, por otra rotura fibrilar, en este caso del bíceps femoral de su pierna derecha, y Rafita, por un edema óseo en el tobillo. A ello hay que unirle que Kepa ultima su recuperación y aún no ha podido debutar en un partido oficial, que ayer no se ejercitó el canterano Chus Hevia por una pubalgia y que incluso Pablo Oliveira -descartado por el club- pronto pasará por el quirófano para solucionar sus molestias en el tobillo.

Varios jugadores de la plantilla recreativista achacaron ayer al infortunio la plaga de lesiones. Así se pronunció Raúl Cámara, quien explicó que "son fruto de la mala fortuna". En parecidos términos se expresó Kepa Blanco, quien dijo que las lesiones "no se deben al mal estado del campo, sino simplemente mala suerte". Ya se sabe: hay que tocar madera.