Carolina Marín comienza la carrera por su segundo oro olímpico

Olvidadas las lesiones que le impidieron defender en Tokio 2020 el oro olímpico logrado en Río 2016, la onubense Carolina Marín vuelve a la carga en pos de su sueño de ser también campeona olímpica en París. Su camino de la reconquista tiene el km 0 este domingo a las 19:30 en la Arena Porte de Chapelle ante la suiza Jenjira Stadelmann, rival a la que se ha enfrentado tres veces saliendo victoriosa en las tres.

La andaluza llega a París como número cuatro del mundo, la única no asiática del 'Top 10', luego de un prometedor inicio de temporada 2024. Ganó el torneo All England el pasado mes de marzo en Birmingham, un torneo de elite. Derrotó en el camino al título a la china Chen Yu Fei en cuartos y a la tailandesa Tai Tzu Ying en semifinales, número 2 y 3 del mundo, respectivamente.

Una semana después ganó el Abierto de Suiza y en abril volvió a proclamarse campeona de Europa, la cuarta corona continental consecutiva. Tras el encuentro frente a Stadelmann se medirá a la irlandesa Rachael Darrach por un puesto en los octavos de final.

"Vivo los Juegos con mucha ilusión y eso es algo que me quiero quedar. En Tokio no estuve por lesión y volver a estar aquí y ganar otra medalla de oro es por lo que quiero luchar", señalaba la volantista nacida en Huelva en la rueda de prensa previa al partido.

Carolina, cuarta del mundo, vuelve reforzada a la cita olímpica, tres años después de la frustración de ver los JJOO de Tokio por televisión, pero de nuevo asentada en la élite, otra vez como principal amenaza de las poderosas raquetas de oriente.

La onubense derribó muros muy elevados construidos por los asiáticos en un deporte no precisamente mayoritario en España. Marín se colgó el oro olímpico en Río, la "Cidade maravilhosa", el título más brillante dentro de un palmarés excepcional, que incluye tres Mundiales (2014, 2015 y 2018) y ocho campeonatos europeos (2014, 2016, 2017, 2018, 2021, 2022, 2023 y 2024).

Aquella presea de Río pasó a la historia, no en vano se convirtió en la primera jugadora no asiática campeona olímpica desde que el bádminton entró en el programa de los Juegos en Barcelona'92.