El nuevo poder holandés

El club de fútbol AZ de la pequeña ciudad de Alkmaar, en el noroeste de Holanda, se ha convertido en el nuevo dominador del fútbol holandés. La entidad, que ha jugado al fútbol profesional de forma permanente desde hace sólo una década, ha desplazado de su hegemonía al tradicional triunvirato: Ajax, Feyenoord y PSV.

El sábado batió al Willem II por 3-1 y ya está a once puntos del Twente Enschede, segundo, y a 14 del Ajax, y deja aún más atrás a los otros dos clubes líderes de fútbol holandés: el PSV está a 15 y el Feyenoord, a 32. "El tradicional equilibrio de poder en la Eredivisie se desmorona poco a poco", dijo el diario AD Sportwereld en su página web.

Desde que la Eredivisie se introdujo en 1956, el título ha ido a parar sólo en tres ocasiones a un equipo distinto de los tres grandes. El enorme éxito del AZ, fundado en 1967, ha sido el resultado de una estrategia cuidadosamente planeada de la profesionalización del club que comenzó en 1993. Ese año, Dirk Scheringa fue designado presidente del AZ.

Scheringa es un éxitoso empresario de la región de Alkmaar y fundador del banco holandés DSB Bank. El banquero comenzó a invertir milliones en su club de fútbol. En 2006, una revista holandesa reveló que Scheringa convirtió la deuda del club de 67 millones de euros en acciones. Eso lo convirtió repentinamente en el nuevo propietario tanto del club como de su estadio.

En 1996, apenas tres años después de convertirse en presidente del AZ, el club volvió a la Eredivisie, la liga profesional de fútbol de Holanda. El AZ descendió un año después, pero volvió a la Eredivisie la temporada siguiente. Desde entonces ha estado en Primera.

En 2004, el entrenador Co Adriaanse fue el que llevó al club de regreso al nivel europeo. Bajo su dirección, el AZ logró llegar a las semifinales de la Copa UEFA. Cuando llegó Louis van Gaal en 2005, el AZ comenzó a invertir en nuevos jugadores como el joven brasileño Da Silva, el marroquí El Hamdaoui, así como los belgas Pocognoli y Graziano Pelle.

AZ jugó una temporada decepcionante y los expertos predijeron que la presente temporada también sería un fracaso. Varios apostaban a que Louis van Gaal ni siquiera llegaría al invierno como entrenador. Pero tras el verano, el viento comenzó a soplar a favor del AZ, mientras sus principales rivales sufrían sus propios problemas.

El Ajax no ha logrado regresar a su pasado nivel, a pesar de la contratación de nuevos jugadores en los últimos años. Ni siquiera la designación como técnico de Marco van Basten logró traer un cambio al club que en el pasado ganó la Copa de Europa.

Los otros dos, el Feyenoord y PSV, aparentemente sufren la misma falta de espíritu y motivación. Ambos clubes intentaron cambiar la situación mediante el despido de sus entrenadores.

Los próximos meses dirán si el éxito del AZ es sólo temporal y si los tres grandes deben reconocer que un nuevo campeón ha logrado llegar a lo más alto del fútbol holandés. "Nos podemos permitir perder tres partidos y todavía ser líderes", dijo Van Gaal, campeón de Europa con el Ajax.