El onubense Joselito, cerca de poner fin a su estancia en el Hellas Verona

Un onubense está muy cerca de poner punto y final a lo que ha supuesto un calvario para él. José Antonio Gómez Márquez, más conocido en el mundo del fútbol como Joselito, negocia con el Hellas Verona los últimos flecos para ser libre y dejar atrás una etapa de cuatro años en las que apenas ha podido desarrollar su prometedora carrera deportiva con normalidad.

El centrocampista cuenta con ofertas de la primera división de Suiza y Portugal. En España, equipos de Segunda División le siguen la pista al joven de apenas 20 años. Cabe recordar que Joselito denunció en abril al conjunto italiano ante la FIFA, reclamando que se declare nula la cláusula de opción de prórroga unilateral en favor de Hellas Verona contenida en el contrato de fecha 27/07/2022 y por la que se le facultaba prorrogar dos años más el contrato más allá de 2024.

Aunque el fútbolista trató de llegar a un acuerdo con el club, esta negociación no llegó a buen puerto, por lo que el andaluz denunció de nuevo el pasado mes de junio. Dicha irregularidad es válida para la Federación Italiana de Fútbol pero no para la FIFA, por lo que el máximo organismo del fútbol internacional permite a Joselito salir libre a cualquier club siempre y cuando no sea en Italia.

Tras pasar por la cantera del Recreativo de Huelva, rápidamente dio el salto a la cantera del Sevilla FC donde permaneció varios años. Con 15 años y todavía en edad cadete, el Coria lo firmó para jugar en Tercera División. Todo un adelantado a su tiempo en lo que parecía ser el inicio de una meteórica carrera.

El mediocentro fue titular indiscutible en el club del Guadalquivir durante la temporada 19/20. Disputó 23 partidos e incluso anotó un gol, en Pozoblanco, cuando aún no había cumplido los 16 años. Este hecho no pasó desapercibido para varias de las mejores canteras del mundo. Equipos como el FC Barcelona, Fulham, Real Sociedad, Betis o Valencia se interesaron en él.

Fue finalmente el Hellas Verona el que se llevó el gato al agua. Después de cuatro años siendo apartado del primer equipo y con un continuo trato vejatorio por parte del cuerpo técnico y dirigentes del club, el onubense podrá emprender camino fuera de Italia y continuar haciendo lo que más le gusta hacer: jugar a fútbol.