El bar de Ayamonte que triunfa con solo tres platos en su carta

En pleno centro, a unos pasos de su plaza de La Laguna, donde está ubicado el ayuntamiento de la ciudad ayamontina, se ubica un bar de los de toda la vida, manteniendo su esencia desde hace casi 80 años.

El Bar Margallo de Ayamonte poco ha cambiado desde que abriese casi a mitad de siglo XX, en el año 1946, pues tienen claro que lo que les hace triunfar, no tiene por qué ser cambiado. Y puede que sea una de las grandes razones por las que continúa su andadura tantas décadas después.

Su carta es algo más que corta, tres platos y punto: pescaito frito variado, chocos fritos y tomate aliñado. Siempre frescos del día y servidos en la vajilla de toda la vida, en su amplia terraza en la calle José Pérez Barroso.

‘El bar del pescaito frito’ es un lugar que congrega a ayamontinos y visitantes, pues saben que es un acierto seguro y quien lo conoce, repite. ¿Su secreto? La calidad de sus platos, pescado fresco recién traído como buena zona costera, y un aliño secreto en su tomate que encanta a todo el mundo.

Los comensales que pasan por este bar aprecian hasta que solo sean tres “pues no te mareas y te pides los tres y ya está”, dicen muchos. Un lugar entrañable regentado por la misma familia desde hace más de 75 años. Una barra de las de antes, un comedor de los de siempre.

Y como anécdota, también con buen humor. Tras la pandemia, y junto con la reapertura de los bares, también hicieron su carta electrónica para que sus clientes escanearan su código QR y se encontrase... Con sus mismos tres deliciosos platos de siempre.