10 curiosidades sobre el Festival de Cine Iberoamericano
El premio nobel de Literatura en 2010 Mario Vargas Llosa formó parte del jurado de la vigésimo primera edición (1995)
Las 48 ediciones que suma el Festival de Cine Iberoamericano recoge numerosas anécdotas que evidencian la calidad del mismo, capaz de reunir a los mejores artistas del panorama nacional e internacional.
Este evento reúne un bagaje cultural que crece cada año gracias a, tal y como señala su director Manuel H. Martín, "a la ilusión depositada para que parezca que renace con cada edición". El prestigioso pasado avala un Festival al que le espera un enorme futuro.
A lo largo de sus más de 50 años, el certamen onubense ha despertado el amor por el cine entre los onubenses a partir de sus películas, actividades y participantes. Entre estas curiosidades son muchas las que han quedado en el olvido.
La primera edición (1975) fue la única que no resulto ser un certamen competitivo, sino que era una muestra para exhibir películas. Aún así el público reconoció a sus creaciones preferidas, por lo que el largometraje Ya no basta con rezar de Aldo Francia (Chile) y el cortometraje Funerales de arena de Julián Marcos y Francisco Rabal (España) fueron galardonados.
Al año siguiente, el homenajeado fue el director Luis Buñuel, quien llegó a Huelva acompañado de su guionista Jean Claude Carrière. Los olvidados, El ángel exterminador, Viridiana, Belle de Jour y El discreto encanto de la burguesía, entre otros filmes, le han hecho estar considerado como uno de los mejores directores del mundo.
La quinta edición (1979) contó con el homenajeado Carlos Saura, uno de los directores más reputados de la historia del cine español. Obras como La caza o Peppermint frappé avalan su trayectoria. Actualmente, con 87 años de edad ha vuelto a ser noticia tras ofrecer a la cantante Rosalía rodar una película sobre flamenco.
La directora de cine, teatro y televisión española Pilar Miró ostentó el cargo de jurado en la sexta edición (1980), quien obtuviese en 1996 7 premios Goya con El perro del hortelano, un clásico del cine español.
En la undécima edición (1985) el Festival se tornó cómico con el homenaje a Cantinflas, uno de los humoristas más reconocidos de todos los tiempos. El actor mexicano marcó un ante y un después en el género y tuvo una incursión el Hollywood.
Emma Pennella, conocida por los más jóvenes como Concha en Aquí no hay quien viva, aterrizó en la localidad onubense para ser jurado en la décimo cuarta edición (1988). La actriz formaba el trío apodado como Radiopatio junto a los personajes interpretados por Mariví Bilbao y Gemma Cuervo, quien seis años después también sería jurado.
El villano de Kill Bill, una de las obras más populares de Quentin Tarantino, se personó en el Festival para ejercer de jurado en 1990. De este modo, David Carradine trajo a Huelva toda su trayectoria profesional en Hollywood.
El premio nobel de Literatura en 2010 Mario Vargas Llosa formó parte del jurado de la vigésimo primera edición (1995). La misma también sirvió para homenajear a uno de los actores españoles mejor considerados, José Sacristán.
En la vigésimo sexta edición (2000) la actriz Sara Montiel recibió el Premio Ciudad de Huelva. La actriz demostró en Hollywood su elevado nivel artístico, que también refrendaría en España. Veracruz o Yuma son algunos de los filmes de los que ha sido partícipe.
Uno de los rostros más conocidos de la televisión en España recibiría la mayor distinción del certamen. Imanol Arias recogió el Premio Ciudad de Huelva en 2003, dos años después de iniciarse en Cuéntame.