No era onubense: El hombre que convirtió a Huelva en una de las provincias más prósperas de España

Una de las avenidas más conocidas de Huelva lleva su nombre, y no es para menos: Una de sus obras más importantes, el hotel más lujoso de la época (actual Casa Colón), figura relevante en la creación del Recreativo de Huelva, impulsor de las líneas de ferrocaril Sevilla-Huelva y Zafra-Huelva, además de gestionar la compra de las minas de Riotinto.

Guillermo Sundheim y Giesse, nacido en Giesen, Alemania, el 3 de julio de 1840, se afincó en nuestra capital y se convirtió en un enamorado de Huelva, hasta el punto de convertirla en una de las ciudades más prósperas de España del último tercio del siglo XIX, hasta su fallecimiento el 7 de agosto de 1903.

Una de sus obras más importantes fue el espectacular Hotel Colón (actual Casa Colón), cuyas obras comenzaron en 1881 y concluyeron con su inauguración el 26 de junio de 1883. En este mismo edificio fue fundado el 23 de diciembre de 1889, el Real Club Recreativo de Huelva, entre los socios fundadores se encontraba también Guillermo Sundheim que, además, ejerció como presidente de la Junta de Obras del Puerto, cargo que ocupó entre el 23 de agosto de 1895 y el 10 de enero de 1897.

Otra obra de Sundheim, uno de los cinco ferrocarriles con los que Huelva contaría: el ferrocarril Sevilla-Huelva, que fue inaugurado el 15 de marzo de 1880, además de la línea Zafra-Huelva, construida entre 1881 y 1889.

También gestionó la compra de las minas de Riotinto, que serían adquiridas por el banquero británico Hugh Matheson y que supondría para la provincia, una de las mayores fuentes de ingresos con la que contaría Huelva durante muchos años.

En plena Sierra de Aracena y Picos de Aroche, entre Galaroza y Fuenteheridos, poseía una finca llamada Villa Onuba, lugar que hoy día es un hotel rural en el que podemos alojarnos, y en el que se encuentra un maravilloso jardín botánico.

Sundheim también participó activamente en los acontecimientos del cuarto centenario del Descubrimiento de América, siendo uno de los mayores artífices de los actos conmemorativos que se llevaron a cabo en la ciudad.

"En marzo de 1882, el rey Alfonso XII visitaba Huelva, Sundheim lo recibió en la puerta de su casa, donde estuvo cenando junto a las autoridades de Huelva y en compañía del matrimonio Sundheim. Guillermo Sundheim, el alemán que llegó a Huelva y consiguió llevar a las cotas más altas de la economía mundial a toda la provincia de Huelva, fue homenajeado en varias ocasiones por los hechos aquí expuestos y muchos más.

La dedicación de una de las arterias de la capital en 1892, junto al nombramiento de Hijo Adoptivo de la Ciudad el 13 de octubre de 1879 y el homenaje que recibió por parte del Ayuntamiento en agosto de 1905, dedicándole una placa conmemorativa en la casa donde había residido durante tantos años en Huelva, fueron los homenajes que se le tributarían en la capital. En 1937 hubo un intento de cambiar parte del nombre de la Alameda por el de calle Cardenal Segura, pero, finalmente, a pesar del acuerdo del Ayuntamiento de Huelva, el nombre de la Alameda Sundheim siguió tal y como se rotuló en 1892, manteniéndose hasta hoy a pesar de los acontecimientos políticos por los que ha pasado España".