Estos son algunos de los más bellos e imponentes castillos que debes conocer en Huelva

La provincia de Huelva está plagada de mágicos castillos llenos de belleza que merecen ser descubriertos. Paisajes únicos en los que perderte en la historia medieval onubense.

Descubre su patrimonio único a través de las fortificaciones que se extienden a lo largo de la provincia, serás testigo de la historia de sus pueblos. Estos son los 7 más conocidos y destacables de la veintena que se expanden por nuestra tierra.

Castillo de Cortegana

El castillo de Cortegana, fortificación construida para defender el Reino de Castilla, es uno de los monumentos más visitados de la provincia de Huelva. Declarado Bien de Interés Cultural. En el momento que decidas visitar el Castillo, sentirás la magia que te impregna el edificio y su entorno. Sin duda, un hito patrimonial que tienes que conocer en tu visita al pueblo de Cortegana. Nada se sabe con precisión sobre el origen del Castillo de Cortegana. Tal y como recogen desde el portal turístico de la Junta de Andalucía, andalucia.org, ni las escasas fuentes escritas conocidas ni la intervención arqueológica practicada en el recinto, aportan suficientes datos para poder señalar con certeza la fecha exacta de su fundación. El único testimonio documental referente a su origen es una leyenda oral recogida por Juan de Ledesma en 1633 y, posteriormente, por Rodrigo Caro en 1634, que declara la mítica fundación del castillo por un caballero llamado Pedro Domingo que llegó a Cortegana tras haber caído en desgracia en la Corte, aunque tal narración resulta poco fiable. Más recientemente, se ha venido vinculando su fundación con la figura del rey Sancho IV de Castilla quien, en 1293, autorizó al concejo de la ciudad de Sevilla a construir cierto número de castillos para la defensa de su alfoz. Horario: Del 21 de Septiembre al 20 de Junio: de martes a domingo de 11:00 a 14:00 h. y de 16:00 a 18:00 h. Del 21 de Junio al 20 de Septiembre: de martes a domingo de 11:00 a 14:00 h. y de 17:00 a 19:00 h. Cerrado los Lunes, excepto festivos, que pasaría al Martes.

Castillo-Mezquita de Almonaster La Real

La villa encastillada de Almonaster se asienta sobre un altozano, disponiendo de un amplio control visual del entorno, acogiendo en su interior una mezquita, transformada tras su conquista cristiana en ermita bajo la advocación inicial de Santa María. El recinto fortificado acogía intramuros a la población en época Alto y Bajo Medieval, hasta que el incremento demográfico y la situación geopolítica permitió que la misma se extendiese hacia el valle. Los resultados de las campañas arqueológicas muestran la existencia de cuatro fases ocupacionales en el recinto fortificado: Califal, Almohade, Bajomedieval Cristiana, y Moderna. De origen califal, el recinto amurallado debió de erigirse en el siglo X, constando de una primitiva cerca de mampostería que en parte fue reaprovechada durante la época almohade. Es en esta época cuando se erigieron fábricas de tapial, ampliándose la fortificación. En momentos medievales cristianos, las reformas obedecen a reparaciones, que también se evidencian entre finales del s. XVI y primera mitad del s. XVII. Por último, la reforma moderna transformó la definición formal de lienzos y de las torres, que de planta cuadrada pasaron a los actuales cubos semicirculares. Al Munastir fue cabecera de Iqlim de la Cora de Isbiliya en época andalusí, circunstancia que justifica su amplia superficie circunvallada. Contó con dos puertas, la principal, actualmente desaparecida se insertaba en la torre del Alcaide. En la zona meridional se abría la puerta secundaria consistente en un desdoblamiento de la muralla. Por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía se acometieron obras de consolidación del lienzo norte del recinto fortificado de Almonaster la Real, fundadas en los estudios arqueológicos paramentales abordados en 2006.

Castillo de Aracena

La villa fortificada de Aracena se ubica en altura, con un amplio control del territorio y por donde discurría la vía romana que comunicaba la zona de Riotinto con Emerita. El alcázar del castillo de Aracena se erigió sobre el primitivo asentamiento andalusí, a mediados del siglo XIII, para la defensa del estratégico lugar conquistado por Portugal, a través de la Orden del Hospital. En el siglo XV la población comienza a expandirse extramuros, por la ladera Este. De planta poligonal adaptada al terreno donde se asienta, el modelo constructivo se asemeja al de los castillos portugueses de Moura y Noudar. El Castillo de Aracena presenta doble recinto amurallado. El primero circundaba todo el cerro para ofrecer protección a los pobladores medievales con una extensión de 2,44 hectáreas. Entre esta muralla de la cerca urbana y el castillo se localizaban las viviendas y la iglesia de Santa María, de aspecto fortificado, construida en el siglo XIV. El castillo de Aracena conserva dos aljibes, uno en la zona del alcázar y otro en el patio de armas. Tras la redacción del Plan Director en 2009 se han acometido distintas intervenciones de restauración e investigación arqueológica a cargo del ayuntamiento de Aracena y de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Horario: Invierno (octubre a mayo): todos los días, a las 11:45, 12:45, 13:45, 16:00, 17:00 y 17:45 h. Verano (junio a septiembre): todos los días, a las 11:30, 12:30, 13:30, 18:00, 19:00 y 20:00 h.

Castillo de Aroche

Construido durante el s. XII, en época almohade, el castillo sería la qasaba o alcazaba de la población andalusí. Presenta planta rectangular y fue construido con fábrica de tapial y decorado con un encintado de cal que simulaba grandes sillares. Las torres son de planta cuadrada o rectangular y algunas contaban con dependencias interiores. El acceso principal, hoy desaparecido, era en recodo, a través del interior de una torre. Conserva una poterna secundaria, conocida como Puerta de la Reina, realizada con dos arcos de herradura, y vinculada a la leyenda de la Reina Saluquia. Aroche fue conquistada a mediados del s. XIII por la Orden del Hospital de San Juan. A partir de este momento fue reivindicada tanto por Portugal como por España. La firma del tratado de Alcañices zanjó la disputa. Tras la conquista cristiana sufrió diversas reformas, siendo la más importante la conversión de su plaza de armas en plaza de toros en 1802. En el interior se encuentra la Sala del Alcaide. Su visita es guiada desde la Oficina Municipal de Turismo. Horario: Del 1 de octubre al 14 de mayo: de viernes a domingo y festivos de 10.00 a 14.00 y de 15:00 a 17:00. Del 14 de mayo al 30 de septiembre: de miércoles a domingo y festivos de 11.00 a 15.00.

Castillo de Santa Olalla del Cala

El castillo de Santa Olalla del Cala fue mandado construir por Sancho IV el Bravo en 1293. Su construcción, coetánea a la del castillo de Cumbres Mayores, supuso la consolidación de una línea defensiva de frontera en las estribaciones occidentales de Sierra Morena, conocida como la Banda Gallega. Atravesada por la Vía de la Plata -histórica ruta de comunicación norte-sur y de trasiego de minerales, mercancías y ganados- el sitio de Santa Olalla ha representado un hito milenario de asentamiento, de dominio y defensa del territorio, incluso durante la invasión francesa cuando en 1809 ocupa el castillo un Regimiento de la Infantería de Marina para defender esta vía de penetración a Andalucía. Durante los siglos XIV y XV se documentan diversas reformas del castillo, subiendo las cotas de rasante y recreciendo los lienzos de murallas y las torres, que además se cubren. Responde a las trazas de una fortaleza medieval cristiana gótica de influencia mudéjar en diversos ámbitos, como las impostas de ladrillo marcando los niveles el suelo, las bóvedas en las torres o los revocos de cal imitando sillares en la entrada principal. El castillo se ha restaurado por la Consejería de Cultura en 2006. Horario: Fines de semana y festivos de 10:00 a 18:00 h. El resto de los días sólo previa reserva.

Castillo de Cumbres Mayores

Uno de los símbolos más destacados de Cumbres Mayores. Su construcción está fechada en Toro, el 04 de Noviembre de 1293 por privilegio del rey Sancho IV 'El Bravo', aunque encontramos estudios e indicios que indican que podía ser anterior. Su entrada impresiona a los sentidos, el estar franqueado por sus dos torres del homenaje de altura majestuosa y coronada por un perfecto arco de cañón, esto hace que fluya en ti una sensación de pequeñez. Su sencillez y robustez al mismo tiempo utilizando el granito mezclado con las rocas de la zona, hacen indiscutible la elegancia del pasado medieval del lugar. Su espacio interior, llega a convertirse en la Fortaleza de mayores dimensiones de la Banda Gallega, donde sus paños de alturas igualadas siguen adornadas por un centenar de almenas salpicadas por torres cuadradas y circulares. No podemos dejar de mencionar la importancia de esta fortificación en ámbitos Patrimoniales. Es el Primer Monumento Nacional declarado en la Provincia de Huelva por Alfonso XIII, el 2 de Agosto de 1895. Además ostenta el titulo de Monumento de Bien de Interés Cultural (BIC). Horario: Sábados y festivos de 10:00 a 13:00 h. y de 16:00 a 19:00 h. Domingo de 10:00 a 13:30 h.

Castillo de Niebla

Este pueblo de la provincia de Huelva está considerado como una de esas joyas del país que merece la pena conocer por su incomparable patrimonio. Tal y como han destacado en una de las revistas de viajes más icónicas, National Geographic, este pueblo es uno de los mejores ejemplos que queda de baluarte almohade, sobre todo en cuestión de tamaño (2 kilómetros en total) y de número de elementos, con cuarenta torres y cinco puertas que hoy en día siguen protegiendo a esta localidad. En su interior, espera el imponente castillo, así como otros monumentos de gran interés, como la iglesia de Santa María la Granada (con detalles moriscos). Y alrededor, en extramuros, el puente sobre el río Tinto y las necrópolis dolménicas se ganan su minuto de gloria. localidad cuenta con uno de los conjuntos amurallados mejor conservados de Andalucía. El conjunto histórico de Niebla está compuesto por el castillo, el paseo del recinto amurallado, la Iglesia de San Martín, la Iglesia de Santa María de la Granada y la Casa de la Cultura, que se encuentra acondicionada para que sea visitable. El Castillo de Niebla o de los Guzmanes, de origen romano, conserva elementos del antiguo alcázar árabe, aunque su planta actual data del siglo XV. El castillo ha estado habitado hasta fechas relativamente recientes y ha sufrido diversas reformas por parte de sus sucesivos ocupantes: visigodos, árabes y cristianos. En la actualidad, cuenta con varias salas tematizadas en las que se recrean épocas pasadas, como la Cámara de la Condesa, la Armería o las Mazmorras, dos niveles de subterráneos donde se exponen más de 30 instrumentos y máquinas de tortura. Quien lo visite de nuevo se va a encontrar con la barbacana del recinto defensivo totalmente rehabilitada y con numerosas actuaciones en las salas, zonas de azotea, etc. Un plan ideal para disfrutar en familia es recorrer este encantador pueblo medieval a través de una visita teatralizada por los rincones más emblemáticos, la Muralla y el Castillo. Consulta aquí las rutas y visitas para viajar al pasado desde la provincia de Huelva.