Ariema levantará en Huelva la primera fábrica de electrolizadores alcalinos 100% española

Huelva/España contará por fin con una fábrica de electrolizadores alcalinos de tecnología y fabricación íntegramente nacional. La empresa Ariema Enerxía instalará en Huelva la primera planta del país dedicada a la producción completa de estos equipos clave para el desarrollo del hidrógeno verde, una tecnología estratégica en la transición energética europea. La iniciativa contará con una ayuda de 19 millones de euros procedente de la primera convocatoria de incentivos a proyectos industriales ligados a las energías renovables y el almacenamiento, gestionada por el Ministerio para la Transición Ecológica. La cifra convierte a Ariema en el segundo proyecto con mayor dotación de los 34 seleccionados a nivel nacional. Solo una megainiciativa en Gijón, centrada en la producción de lingotes de silicio para el sector fotovoltaico, ha recibido más financiación.

La futura fábrica de Ariema se instalará en suelo de Huelva capital, aunque la ubicación exacta aún no se ha concretado. La apuesta del gobierno municipal por poner a disposición de estas industrias parcelas nuevas para su instalación en la capital ha sido clave para la decisión de la empresa. La inversión total ascenderá a 35 millones de euros y la previsión es que las obras arranquen en octubre de 2025, con una primera fase operativa a finales de 2026. Una vez finalizada, la instalación alcanzará una capacidad de producción de 200 megavatios al año y generará alrededor de 400 empleos directos, a los que se sumarán los inducidos en toda la cadena de suministro. La cifra multiplica por diez la plantilla actual de la empresa en Huelva, donde Ariema ya cuenta con cerca de 40 trabajadores especializados en ingeniería, diseño, integración y desarrollo de proyectos ligados al hidrógeno.

El proyecto tiene una dimensión tecnológica singular. A diferencia de otras iniciativas ya en marcha en el país, la planta de Ariema no se limitará al ensamblaje final ni dependerá de componentes importados. Fabricará de forma completa electrolizadores alcalinos con tecnología desarrollada en España. Esto supone una diferencia sustancial frente a otras referencias del sector: la planta de Cummins en Guadalajara importa stacks ensamblados, y la de H2B2 en Sevilla produce electrolizadores de tipo PEM (proton exchange membrane) pero con stacks importados. En el caso de Ariema, hablamos de soberanía tecnológica, capacidad industrial plena y especialización en la tipología de electrolizador alcalino, el más utilizado hoy por su robustez, escalabilidad y costes más bajos frente a otras tecnologías emergentes.

“Es una gran noticia para Ariema y para Huelva. Este respaldo público supone un gran impulso para los equipos fabricados en España y para el empleo cualificado nacional”, ha señalado el ceo de Ariema, Rafael Luque.

Este salto cualitativo se inscribe en el marco de una política industrial cada vez más exigente en términos de autonomía estratégica. En palabras de la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, “el reto ahora es demostrar que los nuevos componentes que exige la transición energética también se pueden fabricar en España y en Europa”. La dependencia de proveedores externos, especialmente asiáticos, se ha convertido en una vulnerabilidad estructural para el desarrollo de renovables a escala. De ahí que el Gobierno haya apostado por apoyar con fondos públicos a aquellas iniciativas capaces de levantar industria real, generar empleo estable y fortalecer cadenas de valor locales.

En ese contexto, Huelva emerge con paso firme como la punta de lanza de la descarbonización industrial en el sur de Europa. A diferencia de otros territorios que aún mueven fichas sobre el tablero del hidrógeno, la provincia andaluza ya empieza a materializar proyectos con fecha, cifras y nombres propios. La nueva planta de Ariema se suma así a un ecosistema en plena efervescencia que incluye desarrollos tan ambiciosos como el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, promovido por Moeve; el proyecto CirCular de Atlantic Copper, que supondrá una revolución en reciclaje de metales estratégicos; o las futuras inversiones de empresas como Trina Solar, Suna Solar, Rolwind, Elyse o Hygreen, todas ellas en fase de planificación avanzada.

Ariema, fundada en 2002 como spin-off del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), ha sido una de las pioneras en el impulso del hidrógeno renovable en España. Su trayectoria combina desarrollo tecnológico, participación en proyectos europeos y asesoramiento técnico especializado. En los últimos años, ha apostado por reforzar su implantación en Huelva, desde donde presta servicios de ingeniería y desarrollo de sistemas energéticos basados en hidrógeno. La decisión de levantar en la ciudad su primera gran planta de producción industrial no es casual: responde tanto a la apuesta local por la industria verde como al potencial logístico y energético que ofrece.

La resolución provisional publicada por el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) reconoce a Ariema como uno de los once proyectos seleccionados en la línea de hidrógeno. En su conjunto, las 34 iniciativas aprobadas recibirán cerca de 300 millones de euros y se distribuyen entre doce comunidades autónomas. Solo Asturias concentra el 70 % del importe total, por la envergadura del proyecto fotovoltaico citado. Andalucía, con cuatro propuestas, capta un 11,8 % del total, entre ellas la de Ariema, que se convierte así en el gran exponente regional de esta convocatoria.

Más allá de las cifras, el proyecto de Ariema refuerza el discurso de un nuevo modelo productivo en el que Huelva tiene un papel protagonista. Un modelo basado en la tecnología propia, la generación de empleo cualificado y la capacidad de competir en mercados globales desde la base industrial. La fábrica de electrolizadores alcalinos no es solo un hito para la empresa, sino un paso más en la consolidación de Huelva como epicentro del hidrógeno verde en el sur de Europa.