La industria abraza las medidas de la Comisión Europea para salvaguardar el acero, aunque pide un mayor esfuerzo

Algeciras/El Plan de Acción para el Acero y los Metales presentado este miércoles por la Comisión Europea ha sido recibido de buen grado por la patronal española del sector. Unesid celebra que Bruselas extienda las contramedidas ante la importación descontrolada de productos siderúrgicos desde fuera de la UE, principalmente de China, aunque pide mayor ambición en aspectos como la transición verde o los precios de la energía para garantizar el futuro de la industria.

Las medidas actuales concluyen en junio de 2026 y el nuevo plan pretende ampliarlas cuando finalicen e, incluso, extenderlas al aluminio, también afectado por los anunciados aranceles de Donald Trump. El Ejecutivo comunitario propondrá aplicar otra medida comercial a largo plazo que "proteja frente a los efectos comerciales negativos" del exceso de capacidad. "Será más efectiva que la actual", dijo el vicepresidente de la Comisión para Industria, Stephane Séjourné.

La salvaguarda actual impone un arancel del 25% a las importaciones de acero que superen una cierta cuota por encima de los niveles históricos de comercio, aunque ya desde el 1 de abril se reforzará para hacer caer las importaciones hasta un 15%, aunque no ha precisado cuáles serán los cambios. La Comisión estudiará también introducir una regla para evitar que terceros países evadan estas tarifas, llamada de "fundido y vertido", que le permitirá considerar como origen del bien el país donde se fundió el metal, independientemente de donde se procesase.

"Con este plan, la Comisión Europea envía un mensaje claro: la industria siderúrgica es un pilar fundamental para la UE", ha declarado Carola Hermoso, directora general de Unesid. "Ahora es el momento de pasar de las palabras a los hechos, implementando soluciones concretas que refuercen nuestra competitividad de forma equitativa", ha añadido.

Unesid destaca la necesidad de revisar el marco comercial mediante la implementación de un sistema que minimice los efectos de la sobrecapacidad global del acero en el mercado europeo. De igual forma, señala, se debe fortalecer la defensa comercial, reforzando los instrumentos contra prácticas desleales como el dumping y las subvenciones extranjeras. También insta a la Comisión Europea a que las medidas de defensa comercial tengan en cuenta tanto la producción de acero como su transformación.

Energía

Como agravante a la situación de la industria acerera, se suma el alto precio de la energía en el bloque comunitario, que es entre tres y cinco veces más cara que en Estados Unidos y representa una gran proporción de los costes de producción, del 17% en el caso del acero y del 40% en el del aluminio ya antes de la crisis energética; así como la falta de interés de los inversores por financiar la descarbonización del sector. "Si Europa quiere acero verde, debe proporcionar los incentivos adecuados para que las inversiones en descarbonización sean viables", ha subrayado la directora general de Unesid.

Para abaratar la energía, Bruselas remite al Plan de Energía Asequible presentado el mes pasado e insta a los países a usar la "flexibilidad" que dejan las normas europeas de ayudas de estado y de energía para rebajar los costes. Estas les permiten, por ejemplo, rebajar a cero los impuestos para las industrias de alto consumo energético bajo ciertas condiciones o aplicar tarifas reducidas por el uso de la red para aliviar la volatilidad de precios.

La Comisión prevé ampliar el alcance del Mecanismo de Ajuste de Carbono en Frontera (CBAM) -un arancel climático que grava las importaciones con mayor huella de carbono- para incluir ciertos productos hechos a base de acero o aluminio y evitar que los importadores hagan un "blanqueo ecológico" de estos productos, compitiendo de forma desleal con los europeos.

Unesid insiste en la necesidad de medidas inmediatas para garantizar precios energéticos competitivos que permitan a las acerías españolas y europeas seguir operando sin desventaja frente a sus competidores internacionales. "El coste de la energía es el elefante en la habitación. Si no se toman medidas efectivas para reducirlo, todo lo demás perderá efectividad", ha advertido Carola Hermoso.

La patronal española entiende que el CBAM requiere una revisión profunda para cerrar lagunas legales, extender su alcance a productos transformados y garantizar la competitividad de las exportaciones europeas. Igualmente, consideran crucial reconocer la chatarra como un recurso estratégico dentro de la economía circular y asegurar su disponibilidad para la industria siderúrgica europea, evitando distorsiones de mercado derivadas de exportaciones sin control.

A pesar de los avances que supone el plan, la patronal insiste en que la rapidez en su aplicación determinará su éxito o fracaso, y en que lo más urgente es lograr una implementación efectiva. Del mismo modo, reafirma su postura para seguir colaborando con las instituciones europeas de cara a que la aplicación de este Plan de Acción genere resultados tangibles para la industria y la economía europea en su conjunto.