Macarena de la Torre: la artista de Almonte que lleva el 'Flamenkencer' por bandera

El flamenco como seña de identidad y el ser rociera como forma de vida, una almonteña con todas las letras que, aunque no se autodenomine como influencer, las redes sociales se han convertido en su día a día compartiendo toda la felicidad y energía que desprende con sus seguidores. Macarena de la Torre, artista de profesión, se ha convertido en una referente, una mujer trabajadora y polifacética cuya rutina no deja indiferente a nadie. Su forma de hablar desprende personalidad propia, la que le imprime a su propia marca, Flamenkencer, en la que su vino blanco frizzante está arrasando en toda la provincia.

Con más de 46.000 seguidores en Instagram y casi 50.000 en Facebook, Macarena ha creado una amplia comunidad a la que se dirige a diario mostrando su vida tal y cómo es, tanto su faceta de artista que va de escenario en escenario, a la de ama de casa mostrando las recetas que cocina en su casa o algunos trucos de belleza a la hora del peinado y el maquillaje. Siendo fiel a una misma ha despertado el interés de muchos usuarios que no se pierden detalle sobre su vida.

Pero antes de sumergirse en el mundo de las redes sociales, Macarena de la Torre comenzó una amplia carrera en el flamenco, que ha llegado hasta la actualidad cosechando numerosos éxitos. “Mi amor por el cante es algo que me viene por genética, el 90% de mi familia canta bien y todo se lo debemos a mi abuela, una fiel seguidora de la niña de los peines”, explica mientras sonríe. Aunque se subió por primera vez a un escenario con tres años, su carrera se dispar mientras trabajaba en el Ayuntamiento de Almonte. Se inscribió en un concurso de fandangos y para su sorpresa fue la ganadora, premiada con una beca de formación en la Fundación Cristina Heeren en Sevilla, “donde tuve la oportunidad de trabajar con grandes artistas como Arcángel, José Merced o Manolo Sanlúcar”. A raíz de esta formación comenzó a recorrer escenarios por Andalucía y España y su carrera despegó.

Actualmente, después de un verano en la aldea, como los ha pasado durante toda su vida y con grandes recuerdos como su colaboración como artista invitada en el concierto de El Barrio en la provincia de Huelva, Macarena vuelve a Almonte con el objetivo de cumplir uno de sus sueños, ser la hermana mayor de la Hermandad Matriz de Almonte durante la Romería del Rocío 2024. Para ella, nacer en su pueblo al que se encuentra muy ligada implica de una forma genética el ser rociero, “mi madre, devota de la Virgen, lleva por dentro su amor mariano y ella ha sabido transmitirlo a toda la familia. Mi madre es una abuela almonteña y yo heredo su labor y portaré su enser durante los traslados”.

Su promesa a la Virgen para ser hermana mayor estuvo a punto de cumplirse en 2019, pero con la pandemia todo se torció, por ello Macarena ha visto ahora el momento para volver a presentar su candidatura. “Para mí es muy especial porque esta idea nace como promesa de una enfermedad que tuve con seis añitos y desde siempre en mi casa se ha hablado de que tengo que ser hermana mayor un año. Además, mi suegro falleció y se quedó con la ilusión de serlo y para él era todo un orgullo que yo me presentara”, añade.

Macarena de la Torre siempre arropada por su familia, su marido y a la vez manager, su hijo y todos los que la rodean, transmite lo bonito de ser rociera. Para ella, la letra de la sevillana “no se puede ser rociero tan solo al año una vez”, retrata sus pensamientos, que el espíritu de la romería y de la fe tiene que estar siempre vivo en el interior y que hay que tender la mano al compañero los 365 días del año. Ahora el pueblo de Almonte decidirá si Macarena cumplirá su sueño como hermana mayor, en la que su mejor campaña será salir a la calle y acercarse a todos, para que unidos se engrandezca su amor por la Virgen del Rocío.