El Rocío que abrió el Año Santo Mariano

EL Papa Juan Pablo II ya pensaba en El Rocío en 1987 cuando abría el Año Santo Mariano el Domingo de Pentecostés. En El Real se celebró la solemne misa presidida por el obispo de Huelva, Rafael González Moralejo, quien resaltó el júbilo que ésto suponía. Un Año Santo Mariano con el que Juan Pablo II rinde tributo a la Madre del Redentor en el horizonte del año 2000. Todo un año que culminaría en agosto del año siguiente en la fiesta de la Asunción, que en Almonte acaricia el Rocío Chico.

Veinticinco años después cobra más importancia, cuando coincidiendo con el Bicentenario del Rocío Chico y el traslado de la Virgen del Rocío a Almonte y se ha pedido al obispo de Huelva, José Vilaplana, que lo declare Año Mariano Jubilar en la diócesis. Aquel Rocío de 1987 fue muy especial, así lo señaló el obispo: "Cualquiera diría -queridos rocieros- que el Papa hubiera querido, con toda deliberación, hacer coincidir las dos fiestas, la de Pentecostés y la apertura del Año Mariano, pensando precisamente en nosotros. Como si quisiera recordarnos -por si acaso no lo supiéramos bien- algo que es extraordinariamente importante para nosotros. El Papa, en efecto, ha escrito toda una encíclica, titulada La Madre del Redentor, destinada a exponer toda la verdad sobre María; y en ella, más concretamente, expone la parte importantísima que el Espíritu Santo tiene en toda la vida y misión de María".

Una antesala, sin duda a aquella visita del Papa Juan Pablo II al Rocío. La misa del Real tuvo por la noche su continuación con el rosario que presidió el obispo, Rafael González Moralejo.

El Rocío llegaba a las 75 hermandades, con la incorporación de Sevilla Sur, Cerro del Águila, Las Cabezas de San Juan, Toledo -que entró con La Palma del Condado- y Almensilla. Un Rocío también de sobresalto, a la Hermandad de Coria se le cerraron las puertas de la ermita y a Triana en la procesión no se le acercó la Virgen. Un año en el que la Hermandad Matriz de Almonte aborda la reforma de sus reglas con un cambio especialmente significativo para dar voz y voto a la mujer en la hermandad.

Hubo dos fallecimientos, un rociero de Villamanrique y una niña de Huelva, que trasladada al hospital Manuel Lois falleció, y se realizó una donación múltiple de órganos.

Se le daba especial atención a los famosos y por esta romería pasaron personajes como Lola Flores, Juanita Reina, María Montes, Juan Valdés e incluso Fernando Sánchez Dragó. Un Rocío que estuvo en medio de la campaña electoral a las municipales, cuando se votaban entre semana. Las elecciones fueron el miércoles.