Convivencia Solidaria en el Rocío junto a las Niñas de las Hermanas de la Cruz

La Hermandad del Rocío de Valverde revive esta actividad reforzando el compromiso con quienes más lo necesitan

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Niñas del convento de las Hermanas de la Cruz de Valverde del Camino en El Rocío.
Niñas del convento de las Hermanas de la Cruz de Valverde del Camino en El Rocío. / M.G
Marta Sánchez Contioso

20 de noviembre 2024 - 07:00

El Rocío/Este fin de semana, una representación de la Hermandad del Rocío de Valverde se desplazó a la aldea almonteña con un doble propósito: acompañar a la Hermandad de Villarrasa en su peregrinación extraordinaria y revivir una de sus actividades más significativa de su obra social. Desde hace ocho años, esta Hermandad organiza una convivencia con las niñas internas de las Hermanas de la Cruz, una actividad que ha logrado consolidarse como un evento esperado y emotivo para las participantes.

En esta ocasión, la jornada retomó su escenario habitual, la aldea del Rocío, tras haber tenido que realizarse en 2023 a la Casa Hermandad de Valverde. El cambio del año pasado se debió a una "especie de epidemia de mosquitos" en la aldea, como explica Guadalupe De Los Santos, vocal de obra social de la Hermandad: “No queríamos llevar a nadie allí bajo nuestra responsabilidad”. En años anteriores, además de las niñas, también habían participado las ancianas que residen en el convento. Sin embargo, tras la pandemia de COVID-19, las religiosas consideraron que la delicada salud de las mayores no permitía su traslado.

Niñas jugando en la Hermandad.
Niñas jugando en la Hermandad. / M.G

El día comenzó con la asistencia a la eucaristía en la Ermita del Rocío. Tras la misa, niñas y monitores disfrutaron de actividades lúdicas, cantes, bailes y otras dinámicas pensadas para fomentar la convivencia y la alegría compartida. Guadalupe destaca el impacto emocional de esta experiencia: “Se fueron muy agradecidas, y las hermanas también. Te cogen un cariño especial, te lo transmiten y tú a ellas. Es una experiencia que hay que vivirla, ya sea en El Rocío o donde sea”.

No solo destacan las risas y momentos compartidos, sino también hubo tiempo para reflexionar durante el viaje de regreso: “Todos cuando íbamos en el autobús de vuelta decíamos lo mismo, que es una alegría poder compartir momentos con estas niñas”. Estas iniciativas no solo las beneficia a ellas, sino también a quienes participan, al recordarles la importancia de tender la mano a quienes más lo necesitan.

Con esta octava edición, la Hermandad renueva su propósito de seguir ofreciendo espacios de encuentro y apoyo a través de su obra social durante todo el año.

 

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