El Rocío: Un sendero facilita la llegada a la ermita de personas con movilidad reducida

El Ayuntamiento de Almonte se ha puesto manos a la obra para intentar dar solución a uno los problemas más graves que tiene encima de la mesa en la aldea del Rocío: su falta de accesibilidad para las personas con movilidad reducida. De hecho, en abril de este mismo año, el presidente de la asociación Camino del Rocío sin Barreras, José Fernández, dejaba un dato demoledor: El 95% de los espacios de la aldea de El Rocío no son accesibles para personas con discapacidad.

La asociación denunciaba entonces que "el acceso a la aldea, sus calles, sus casas de hermandad, sus comercios, bancos y farmacias impiden hacer el Camino del Rocío y ver a la Virgen como el resto de ciudadanos, o como lo hacían esas mismas personas antes de tener su incapacidad, por lo que debe ser un empeño de todos y un trabajo en red porque a todos nos puede pasar y todos tenemos personas cercanas a las que les ocurre".

Con el objetivo de revertir la situación, el Ayuntamiento de Almonte ha habilitado un sendero para facilitar la llegada a la Ermita de personas con movilidad reducida. Desde el Consistorio han explicado que se trata de un camino compactado en firme que va desde el Paseo Marismeño hasta la ermita, pasando por la Capilla Votiva, y que está señalizado. “Desde el Ayuntamiento de Almonte, pedimos la colaboración de todos los ciudadanos para que este sendero sea utilizado por las personas con movilidad reducida. Poco a poco, por un Rocío más accesible”, han apuntado.

La iniciativa ha sido acogida de buen grado por la propia asociación Camino del Rocío sin Barreras que, tras las críticas y las denuncias realizadas en el mes de abril, agradece y reconoce ahora esta actuación. “Gracias por el esfuerzo y el reconocimiento de la necesidad de que las personas con discapacidad puedan acceder a la Virgen todos los días del año”, han señalado a través de sus redes sociales.

Esta asociación organiza cada año ‘Camino sin Barreras’, una iniciativa que permite a un centenar de peregrinos con discapacidad o movilidad reducida realizar el camino hasta la aldea almonteña y mostrar su fervor y devoción ante la Virgen del Rocío en el santuario.