El Rocío: Estos son los puntos que recoge la Agenda Urbana 2030 sobre la aldea

El Rocío/El Ayuntamiento de Almonte ha presentado un ambicioso proyecto con la intención de servir de guía en acciones de desarrollo sostenible en los próximos años para el municipio del condado, la aldea de El Rocío y Matalascañas. Una Agenda Urbana 2030, que tiene como objetivo “construir un municipio donde el desarrollo económico vaya de la mano de la protección del medioambiente y la cohesión social, estando presente la voz de todos”, aseguran desde el consistorio. Desean seguir esa línea, cumpliendo requisitos para poseer subvenciones estratégicas en el desarrollo urbano sostenible en Europa.

El borrador del proyecto fue presentado el pasado viernes 22 de noviembre en el Teatro Salvador Távora de Almonte. Previo a ese acto, el consistorio había pedido por sus redes sociales la colaboración de los vecinos haciéndoles partícipe en la elaboración de este. Tras varios meses, el resultado ha sido un boceto que engloba innovación y sostenibilidad. Entre los objetivos: Ordenar el territorio y hacer un uso racional del suelo, evitar la dispersión urbana, revitalizar la ciudad o prevenir y reducir los impactos del cambio climático y mejorar la resiliencia.

Los retos principales son 3: Convertir en espacio único sobre el que generar valor, de derechos y oportunidades y de innovación y crecimiento.

Lo que afecta a la aldea del Rocío

En lo que respecta a la aldea almonteña, el plan de acción incluye como prioridad la rehabilitación del firme de sus calles, para asegurar funcionalidad, conservación y protección ambiental del entorno. Incluye un levantamiento topográfico para evaluar necesidades de nivelación y drenaje en las calles de arena, mejoras en la permeabilidad del suelo y la implementación de sistemas de captación y drenaje de aguas.

También se hacen cargo de impulsar las acciones necesarias para preservar la Marisma del Rocío a través de intervenciones como el mantenimiento de caños y sistemas de drenaje para mejorar el flujo hídrico, reducir el impacto de los visitantes, y la implementación de medidas que protejan la biodiversidad. Otra de las claves es optimizar las conexiones entre Almonte, El Rocío y Matalascañas, fomentando el uso de vehículos eléctricos e instalando infraestructuras que faciliten su adopción. Este enfoque no solo reducirá la huella de carbono, sino que también contribuirá a mejorar la calidad de vida de los residentes. Además, se impulsan soluciones de movilidad inclusiva.

El dilema de los aparcamientos públicos y de movilidad en la aldea, lo resuelven con un plan basado en círculos de cierre según la época del año y las actividades de la aldea. “Se implementará un cierre fijo permanente y otros cierres variables, ajustados a momentos clave, como la Romería, para reducir el tráfico y la congestión”, se lee en el documento del Plan de Acción. Así se quiere garantizar acceso y compatibilizar el disfrute de la aldea con la conservación de su patrimonio natural y arquitectónico.

La implementación de un sistema de tranvía que conecte los tres núcleos urbanos de Almonte, El Rocío y Matalascañas sería otro ítem sirviendo como una alternativa durante eventos como la romería de El Rocío o poner en funcionamiento el Centro de gestión y coordinación de la Junta de Andalucía (CECOPI) para coordinar la respuesta ante situaciones de emergencia y eventos de gran afluencia de personas en la aldea de El Rocío.

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