Así se denomina también el traje que lució la Virgen del Rocío en su Coronación

El Museo Tesoro de la Virgen del Rocío es un espacio habilitado en el Santuario en el que el visitante puede contemplar no sólo importantes documentos y piezas relacionadas con la Hermandad Matriz de Almonte y la Romería, sino también joyas y trajes de la Virgen del Rocío y el Pastorcito.

Uno de ellos es el traje que la Virgen lució hace más de un siglo, el 8 de junio de 1919, para ser coronada canónicamente. Se trata del denominado también como traje de los Montpensier que, según apunta, la Matriz es uno de los más conocidos de todos cuantos luce habitualmente la sagrada imagen de la Virgen del Rocío.

Se trata de una pieza de autor desconocido de finales del siglo XIX de la que hay más suposiciones que certezas, tal y como puede leerse en la página web de la Matriz. “Debió ser regalo de los duques a la patrona de Almonte por la devoción que éstos le profesaban, especialmente su hija, la condesa de París. Todo ello lo barajamos como hipótesis, ya que no hemos encontrado documentación que lo acredite, pero sí el saber que los duques de Montpensier hicieron diversas donaciones a la ermita rociera”, apunta la hermandad.

“Aunque no conocemos con exactitud qué cosas llegaron a este templo de la mano de la familia de Orleans, intuimos cuales pudieron ser debido al valor material de los mismos, y a algunos elementos en ellos representados, tales como las flores de lis, símbolo de la casa real de Francia, aunque hay autores que afirman que este terno fue regalado a la Patrona de Almonte por la propia Condesa de París, conformando el conjunto la saya, el manto, el rostrillo y el traje para el Niño”, añade la Matriz.

El terno está compuesto por saya, corpiño, mangas, puños, sobre mangas, manto y toca, todo ello en tisú de plata bordado en oro fino. La saya muestra un gran dibujo central con motivos florales y tallos, que cierra en la parte inferior con una amplia cenefa bordada, así como el borde de las sobre mangas, que muestran roleos y motivos vegetales. Está todo bordado con las técnicas de bordado al oro tendido, empleando las puntadas de setillo, ladrillo, pespunte, media honda y cartulinas, empleando los siguientes materiales: hilos lisos, torzal, canutillo y lentejuelas.

El manto por su parte, es la pieza más significativa del conjunto, pues, mostrando en el centro tallada en madera una paloma como símbolo del Espíritu Santo, en alusión a Pentecostés, festividad de esta advocación mariana, el resto de la prenda está salpicada con flores de lis bordadas en oro fino, símbolo y emblema de la Casa de Orleans, a la que pertenecían los donantes.

En 2005 fue restaurado y el bordado pasado a un nuevo tisú, conservándose en la actualidad en perfecto estado. La Matriz recuerda que la Virgen lo lució en la procesión extraordinaria del 8 de septiembre de 2018, con motivo del centenario de su coronación canónica.