"Las sociedades que aprovechan el potencial de los mayores de 55 años son sabias y ricas"

Uno de los mayores expertos en transformación digital. Iñaki Ortega Cachón (Bilbao, 1972), autor de La revolución de las canas, es Doctor en Economía, investigador y profesor de universidad durante los últimos 25 años. Consejero asesor del Centro de Investigación Ageingnomics de la Fundación Mapfre y director general en Madrid de Llorente & Cuenca (LLYC), es profesor de dirección de empresas en la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) y director de programas de liderazgo público de la CEOE. Es un gran experto en transformación digital. El asesinato de Miguel Ángel Blanco por la banda terrorista ETA (1997) marcó un punto de inflexión en su vida que le llevó a ser diputado en el Parlamento vasco en tres legislaturas. Como buen vasco, su mayor afición es el ciclismo de carretera.

Pregunta.-Usted reclama aprovechar mejor el potencial de la población mayor de 55 años en nuestro país.

Respuesta.-Sí. Es una buena noticia que uno de cada tres españoles son mayores de 55 años, con buena salud, esperanza de vida que supera los 83 años y robustez económica, ya que tienen una renta per cápita con un patrimonio mayor que cualquier otra franja de edad. Nos empeñamos en hablar del problema del envejecimiento, pero si se orienta bien este potencial es una revolución positiva para el país que nos traerá más bienestar y más progreso.

P.-¿Qué hace falta para que esa revolución se lleve a cabo?

R.-Primero, que las empresas contraten a mayores de 55 años. Segundo, que estas ofrezcan servicios a los mayores. Tercero, que la administración perciba que esto no es un problema, sino una oportunidad. Y cuarto, que los propios mayores también lideren este proceso.

P.-SeniorTIC, la asociación de Mayores con Tecnología sin ánimo de lucro, camina en esta dirección

R.-Es una asociación de mayores con mucho talento. Es el fiel reflejo de la Revolución de las Canas: que los mayores lideren este proceso de cambio, se movilicen, tengan visibilidad y se empoderen porque no debe venir nadie a hablar por ellos. Su fundador, Carlos Pérez Llorens, se dedica desde hace muchos años a las tecnologías de la información y la comunicación y sabe de lo que habla.

P.-¿Por qué no se ha dado antes la revolución de los mayores?

R.-Porque no se les ha dado el peso o los roles que debían tener. Es normal. Hace sesenta años la esperanza de vida era de 50 años, mientras actualmente la hemos aumentado 30 años. Eso requiere un cambio cultural que algunos territorios del mundo están aplicando y los que lo hagan antes tendrán más retorno y más ventajas.

P.-Las sociedades más sabias aprovechan ese potencial de los mayores activos

R.-Son sociedades más sabias y serán mucho más ricas. El territorio que vio muy claro este potencial de los mayores es Florida (EEUU). Hoy muchos países, como Grecia y Portugal, están lanzando planes para atraer a mayores de todo el mundo a que vivan en su tierra. Eso les permite tener toda una economía de los mayores.

P.-El término Ageingnomics alude a las oportunidades de una economía plateada

R.-Este neologismo anglosajón significa economía del envejecimiento o economía de las canas. Se basa en que si se aprovecha el potencial de los mayores se obtiene un dividendo demográfico: lograr riqueza de una población que no esperabas. Los dividendos demográficos a lo largo de la Historia han sido varios. Lo fueron los inmigrantes (italianos, chinos y de todo el mundo) en Estados Unidos y en España lo fue cuando las mujeres empezaron a incorporarse al mercado laboral (S.XX). El trabajo y el consumo de los mayores puede ser un dividendo para España y Andalucía.

P.-¿Qué medidas hay que tomar para favorecer esta economía del envejecimiento?

R.--Que muchos mayores se instalen en Andalucía, que sigan trabajando en empresas, que haya toda una industria de los cuidados y del turismo para mayores, de productos para mayores...Para eso la Administración debe permitir seguir trabajando y estar jubilado, y dar todas las ventajas para que se pueda seguir contratando a mayores con bonificaciones. Y que las empresas tengan la oportunidad de ofrecer bienes y servicios a los mayores.

P.-Esto contrasta con la tendencia de despidos a los que superan los 55 años

R.-Es antieconómico despedir a los mayores de 55 años, cuando la mayoría de clientes de cualquier empresa tienen 55 años y son los que tienen dinero. Es darte un tiro en la pierna, si eres una empresa ¿Quién despide a los que te pueden atraer clientes y a los que pueden servir a tus clientes? La revolución de las canas es precisamente revertir todo esto.

P.-Qué países lo están haciendo mejor en la gestión del talento de los mayores

R.-Lo hacen muy bien Alemania y Suecia, donde la gente trabaja más años que en España y dispone de mayores ingresos en su jubilación. La clave es que se retiran más tarde que nosotros: tres, cuatro o cinco años más tarde. Y luego tienen algo que aquí no tenemos: los trabajos a tiempo parcial. Aquí pasas de la noche a la mañana de trabajar a retirarte. En Alemania es muy normal lo que llaman los minijobs: te vas retirando con trabajos dos días a la semana, solo por las mañanas o solo por las tardes y eso te permite alargar tu vida laboral, tener más ingresos. Está demostrado que, sintiéndote útil, puede tener una vida más larga.

P.–La clave de vivir más años es sentirse útil...

R.-El investigador Dan Buettner, experto en longevidad, se dio cuenta de que, aparte de comer bien y hacer ejercicio, es importante seguir haciendo pequeños trabajos que te hacen sentir útil y te dan un propósito de vida. Cuando dejas de tener un propósito para seguir viviendo, te mueres.

P.–Los alojamientos colaborativos, los llamados cohousing de mayores, también persiguen esa revolución de las canas

R.-Claro. El cohousing es otra derivada de la economía plateada que promueve una forma de vivir para los mayores, un envejecimiento activo y saludable. En países como Portugal, Grecia, Alemania o Estados Unidos ponen la alfombra roja para que se hagan cohousing que atraen riqueza alrededor, claramente. En España hay iniciativas potentes en Madrid, Canarias, País Vasco, Málaga, etc.