Alonso Sánchez o el marino olvidado

Le llaman el predescubridor de América. Alonso Sánchez es el piloto anónimo como lo describriera Manuel López Flores en su novela histórica, que arranca con la reproducción del documento en el que Alonso Sánchez de Huelva, maestre de la carabela Atlante, daba cuenta a los Reyes Católicos del hallazgo de la isla Quisqueya (hoy República Dominicana y Haití), en el año 1481.

La de Alonso Sánchez ha sido una historia contrapuesta, aunque lo cierto es que en Huelva siempre tuvo su buena acogida, justificada en la experiencia marinera por sus muchas incursiones de la gente de su costa. A todas luces es una de las razones por las que aparece por aquí Cristóbal Colón y arma sus barcos con nuestros marinos. Por ello, a nadie se le escapa que el almirante buscara más información para completar las que le habría llegado de Alonso Sánchez.

Muchas hipótesis sobre este particular, lo que sí es cierto es que de alguna forma Alonso Sánchez se ha erigido en la historia como referente entre los marinos de Huelva y en él se fijó ese homenaje a tantos que surcaron nuestras aguas.

La ciudad le homenajeó dedicándole una céntrica calle, un instituto de segunda enseñanza y el parque que lleva su nombre en el cabezo de la Esperanza. En los Jardines del Muelle tiene un monumento que pasa muy discretamente y que con el tiempo se ha ido deteriorando por la suciedad propia de la piedra. Un Alonso Sánchez de Huelva que necesita algo más que una limpieza, al menos un espacio en el que tenga más protagonismo y no pase desapercibido. Eso ha ocurrido sin ir más lejos en esta celebración del 525 Aniversario del Descubrimiento de América. Ningún acto en torno a su figura, el último gran homenaje tuvo lugar en las Fiestas Colombinas de 1999, con una ofrenda floral con ocasión de la primera visita a Huelva del buque escuela Juan Sebastián Elcano.

No está de más una mirada a Alonso Sánchez, tan olvidado en las últimas décadas, fruto de lo cual es el estado en el que se encuentra. Se trata de un monumento obra del escultor Antonio León Ortega, inaugurado el 17 de marzo de 1970 . Una escultura de unos dos metros de alto, en cuyo basamento, junto al escudo de Huelva se puede leer la inscripción: "Al marino Alonso Sánchez de Huelva, predescubridor del Nuevo Mundo". No fue acertado ponerle un timón, aunque tras la rotura de algunas piezas éste puede parecer un astrolabio. Cosa que se podría arreglar.

Diversas tesis consagran al marino onubense el haber precedido a Cristóbal Colón en el Descubrimiento de América. Cuenta la leyenda que entre los años 1479 y 1484, periodo de tiempo en el que Colón permaneció en Porto Santo, capital de las Islas Madeira, Alonso Sánchez se entrevistó con él desvelándole las claves que confirmaban la existencia de un nuevo mundo. Casi dos lustros más tarde, Colón emprendería la aventura descubridora. Algunos, como el americanista Juan Manzano Manzano, destacan la controvertida frase que aparece reflejada en las capitulaciones de Santa Fe, donde hay una referencia a anteriores incursiones al decir: "Ha descubierto en las mares océanas y del viaje que agora ha de fazer", como aparece en el preámbulo del documento que firman con los Reyes Católicos el 17 de abril de 1492.

En la Plaza de la Soledad estuvo la que la tradición consideraba la casa de Alonso Sánchez. Era La Jangarilla, cuyo recuerdo se conserva en un azulejo colocado por la Asociación de Antiguos Vecinos del Barrio de San Sebastián, en 2012. En 2003 el Ayuntamiento pensó en dignificar el monumento y promovió su traslado hasta esta la plaza, contextualizando la figura del marino en esta. Hubo incluso ideas de traslado al parque que lleva su nombre. Propuestas sin éxito.

Sin embargo, Alonso Sánchez continúa en una esquina de los Jardines del Muelle; donde, al menos, habría que promover la limpieza del mismo.