Azul y sombra, en la nueva paleta de José Antonio Rengel

José Antonio Rengel expone la colección Paleta azul, en la que repasa y explora con destreza todos los matices estéticos de dicho color y sus variantes compositivas.

De esta forma, juega con los tonos, dibujando las formas directamente sobre el caballete, lleno de pintura y sin darle un acabado perfecto, para aportar mayor dinamismo y movimiento a la obra. El artista confiesa que, al enfrentarse a un cuadro, prefiere dejarse de artificios decorativos e intentar terminar de forma salvaje, cuando el sentimiento aún está a flor de piel.

Esta colección, de once magníficas obras, que beben, aunque de manera muy personal e íntima, de la vanguardia pictórica, se convierte en un paseo por la viveza del color, intercalada con multitud de sombras.

El artista da un menor interés al carácter temático de la obra, que no es unitario, ni pretende reflejar nada en concreto, aunque tampoco hace figuras demasiado abstractas. En definitiva, se le da más importancia a la forma, que se convierte en lenguaje propia, que al contenido, que no tiene conexión, ni simbólica ni estética.

En todo caso, convergen una gran variedad de objetos y personas, al antojo de la inspiración del autor, que es capaz de intercalar danza, desnudos y bailarines, en una explosión imaginativa y fantástica.

Los lienzos, de grandes proporciones, oscilantes entre los 90x70 y los 90x60 centímetros, fueron pintados durante una intensiva jornada creativa que se extendió a lo largo de un día, en la que el autor estaba inspirado

La obra pictórica podrá disfrutarse en las paredes del restaurante Rocataliata, que se encuentra en la calle Rico de la capital onubense, hasta mediados del mes de septiembre.