Comercialización y unión, vitales para el sector agroalimentario
El encuentro dedicado a los productos de calidad onubenses busca salidas para el mayor éxito de la marca de Huelva · Los representantes de los productores de jamón, vino y aceite explican sus casos
Comercialización y unión de los productores. Ambos, factores fundamentales. El sector agroalimentario recogió ayer las claves para su futuro en una nueva edición del Foro Gerardo Rojas-Huelva Información, en el que los productos de calidad onubenses fueron la estrella. Jamón, vinos y aceite, representados por los responsables de sus respectivas denominaciones de origen (DO) y marca de garantía.
Con la incuestionable calidad de estos productos como punto de partida, el análisis posterior llevó al camino que se debe recorrer para impulsar el sector como uno de los principales para la economía de la provincia de Huelva. Y es ahí donde la mejora de la comercialización es apuntada como una de las claves de desarrollo.
"De los 1,8 millones de litros que producimos, un millón va directamente al puerto de Málaga para embarcarse hasta Italia. Y de allí se vende a Estados Unidos". Datos reveladores sobre el aceite aportados por Antonio Torres, presidente de la Federación de Andaluza de Empresas Cooperativas Agrícolas (FAECA), representante del sector en el foro, que pidió ayuda a los políticos para abrir el mercado: "En España no hemos tenido a la mafia para vender el aceite en Estados Unidos, pero tenemos a los políticos".
Guillermo García-Palacios, presidente del Consejo Regulador de la DO Jamón de Huelva, destacó "la calidad del agricultor de Huelva", que "no tiene parangón". "Pero el problema es el paso siguiente, la comercialización" y para ello indicó la importancia de que "se unan las cooperativas".
El secretario general de CCOO Huelva, Emilio Fernández, consideró la "pérdida de valor en la comercialización", un "problema estructural de la economía onubense, al igual que lo es de la española y la andaluza".
En la provincia, el problema se concreta en que "Huelva no es capaz de impulsar una fuerte industria agroalimentaria". "Está claro que falta peso político y que influye el aislamiento y el bajo número de población", apuntó Fernández.
En cambio, Natalia Aguilera, gerente de Faeca, defendió la "evolución de la comercialización en Huelva". "Hace siete años se podía tirar de las orejas a todo el mundo. El aceite se vendía todo a granel y ahora se envasa el 35%".
Carlos Weiland, director de la Cátedra del Vino de la Universidad de Huelva, puso también el acento sobre la comercialización, aunque señaló que ésta debe ser acompañada de una mejor divulgación. "Los consumidores creen que conocen pero no saben tanto. Pocos sabrían distinguir un ibérico, un gran reserva o un virgen extra", aseguró.
El presidente del Consejo Regulador de la DO Condado de Huelva, subrayó también la necesidad de unificar a los productores por un bien común, como en su caso tratan de hacer con la implantación de una comercializadora única, "nuestro gran objetivo", para lanzar con fuerza la marca al mercado. "Hay que potenciar las marcas de calidad -añadió- y hacer que se confíe en las denominaciones de origen". "Y que se consuman", apuntó García-Palacios.
Los responsables de las DO del jamón y los vinos insistieron en la necesidad de cuidar las marcas "y si benefician a los vecinos, mejor".
A su vez, Javier Dupuy, director de Fertinagro Sur, puso como ejemplo el caso del jamón, en el que la industria del cerdo blanco ha tratado de adoptar el ibérico para su comercialización, "matando dos industrias". "Hay que reestructurar eso y que cada una tenga su nicho", aconsejó.
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