El Consejo no va “a tomar ninguna decisión” sobre la Semana Santa de Huelva por el coronavirus
Huelva Coronavirus
La Conferencia Episcopal Española llama a suprimir las procesiones en toda España y el consejo onubense espera que sea la Junta de Andalucía la que decida
La decisión de la Diócesis de Huelva de suspender misas y actos de hermandades no es "una buena señal" para la Semana Santa de Huelva. El presidente del consejo, Antonio González, señaló tras conocer el comunicado del Obispado que “hay cumplir con lo que marca la Diócesis y por ello se han suspendido todos los viacrucis, funciones principales y demás actos de las hermandades”. Considera que el anuncio emitido por el Obispado “no es una buena señal” para la Semana Santa onubense, si bien “nosotros no vamos a tomar ninguna decisión al respecto porque no nos compete”.
Sobre qué sucederá con la Semana Santa, “ahora mismo no podemos decir nada porque no sabemos nada. Hay hermandades que han suspendido el reparto de papeletas de sitio o las devuelven, pero nosotros no podemos hacer nada mientras no hay una decisión definitiva por parte de la Junta de Andalucía o de quien corresponda porque son celebraciones en la calle. No es un tema sencillo, es duro”.
La Conferencia Episcopal Española ha emitido unas orientaciones ante la propagación del coronavirus en las que afirma que las procesiones de "este tiempo" han de suprimirse. Aunque en la nota no se especifica si se refiere a las de Semana Santa, algunos obispos, como los de Valladolid, Alicante, Mérida-Badajoz, Mallorca y Ceuta, se han adelantado a las recomendaciones de la CEE y han suprimido precisamente estos desfiles que acompañan a las celebraciones de la Semana Santa.
"Esta situación (la crisis del coronavirus) nos convoca a una creatividad pastoral para ayudarnos unos a otros a vivir la Cuaresma y la Semana Santa de una manera nueva. Los pastores somos especialmente convocados a una nueva entrega y creatividad en la manera de acompañar al Pueblo de Dios", añade en otro momento de las consideraciones que, según precisa, pueden ser modificadas en función de la evolución de la situación y las indicaciones de las adminsitraciones.
Así, señala que en este itinerario cuaresmal, "carente de algunos signos litúrgicos comunitarios y de las expresiones de la devoción popular en la calle", están llamados a un camino aún más arraigado en lo que sostiene la vida espiritual: "la oración, el ayuno y la caridad". "Que los esfuerzos realizados para contener la propagación del coronavirus se acompañen del compromiso de cada fiel para el bien mayor: el cuidado de la vida, la derrota del miedo, el triunfo de la esperanza", añaden.
Por otro lado, precisan que las medidas presentes y futuras obligan a mantener distancias y pide cultivar la cercanía de la oración, es especial por los que padecen la enfermedad, sus familiares y amigos, por el personal sanitario, así como por quienes trabajan por la contención en la propagación del virus. Igualmente, consideran que los templos pueden permanecer abiertos para la oración personal e invocar al Señor los dones de la sabiduría y fortaleza para vivir este momento.
Temas relacionados
No hay comentarios