¿Cuál es la relación entre el Convento de Santa Clara y el Patio los Leones de la Alhambra de Granada?

El patrimonio artístico de la provincia de Huelva es muy valioso y esto queda demostrado en el Monasterio de Santa Clara en Moguer, un lugar que recoge casi 700 años de historia en el que para sorpresa de muchos se puede observar un resquicio del Reino Nazarí de Granada y que tiene mucho que ver con el Patio de los Leones de la Alambra. Se trata de la joya del convento y se encuentra situada en el Coro Bajo, hablamos de la sillería de 1360 que fue creada por musulmanes de Granada siendo la única en el mundo con estas características.

Una gran obra en la que se pueden ver los escudos nobiliarios de las monjas y columnas y capiteles nazaríes, con leones como remate. Estos son una recreación miniatura de los leones de la fuente de la Alhambra siendo ambos coetáneos en el tiempo. Su singularidad proviene además en el es el único coro nazarí del mundo debido a que los musulmanes tenían prohibido realizar trabajos artísticos en lugares cristianos.

Se trata de una obra de un valor incalculable que se puede visitar en el Convento de Santa Clara que guarda numerosos secretos que no dejarán indiferente a nadie.

Visitas guiadas

Este impresionante monasterio guarda un gran patrimonio histórico cultural digno de visitar. Se realiza un recorrido guiado por las diferentes estancias de Santa Clara para que los interesados puedan hacerse una idea de cómo vivían las monjas años atrás en el lugar. El recorrido comienza en el claustrillo mudéjar y después llega al claustro de Las Madres. A continuación se visita el dormitorio, la sala capitular y la antigua despensa que da paso a la cocina original del siglo XIV, donde se encuentra una inmensa chimenea que utilizaban las clarisas para elaborar la comida.

El siguiente espacio es el refectorio, el comedor del convento en el que se pueden observar unas grandes bóvedas es una sala espectacular que acoge eventos culturales de diversa índole. El antecoro contiene piezas de gran interés artístico, como los azulejos sevillanos realizados por Hernando de Valladares en el siglo XVII, además, de un relieve e Montañés, una pintura anónima de la Sagrada Estirpe de silgo XVI y los libros del coro utilizados por las monjas para rezar. Después de este recorrido se llega al coro bajo, calificado por Juanma Moreno como "la mayor joya del monasterio" y tras ello, una amplia iglesia con numerosos detalles.