Conoce el patrimonio religioso onubense
La Virgen María y las almas del Purgatorio
Si pocos edificios de interés se conservan en la ciudad de Huelva menos irán quedando si continúa la piqueta deborándolos. Ahora ha sido al empresa que pretendía construir aquí nuevas viviendas, a pesar de que desde la Gerencia de Urbanismo se le había obligado a respetar la fachada. Después de varios meses del vaciado interior, de la protección de la fachada con un andamiaje, el edificio número 17 de la calle San José diseñado por uno de los arquitectos más prestigiosos de Huelva, José María Pérez Carasa, ha sucumbido a la piqueta. Desde la Gerencia de Urbanismo, según ha sabido Huelva Información, ha emprendido las acciones legales pertinentes abriendo un expediente sancionador a Ciudad Ideal, S.A., como empresa responsable.
Esta obra de 1937, destinada en sus orígenes a casa de renta y construida por iniciativa de Placido Rodríguez Álvarez, resume el gusto de su arquitecto, José María Pérez Carasa, por el juego de volúmenes y la complejidad en la composición de huecos. Según la guía de arquitectura del Colegio Oficial de Arquitectos de Huelva estábamos ante un edificio racionalista de gran belleza. Constaba de dos plantas, se organizaba una vivienda en planta baja y dos en planta primera. Disponía de un lavadero mancomunado en la azotea, resuelto a modo de torreón, componiendo volumétricamente la fachada. Destacaba el gusto y la elegancia en el empleo de los materiales y la compleja composición de huecos.
La Gerencia de Urbanismo concedió a Ciudad Ideal, S.L. licencia de derribo con mantenimiento de fachada en septiembre de 2006. La licencia de nueva planta era para la construcción de dos viviendas, dos oficinas y local comercial, siempre con mantenimiento de fachada, pero al no empezar las obras se les resolvió por caducidad, a la que presentaron alegaciones, que no fueron aceptada, dando por caducada la licencia y obligándoles a solicitar una nueva licencia en el plazo máximo de dos meses, prohibiéndoles expresamente cualquier actuación en la obra y advirtiéndoles que si en el plazo de dos meses no solicitan nueva licencia, o aún solicitándola, no se les concede, se declarará la venta forzosa de dicha parcela para su ejecución por sustitución. Un plazo de dos meses que aún no se ha cumplido, pero que sí ha sido suficiente para que la empresa derribe la fachada, algo a lo que según la Urbanismo no estaban autorizados, ya que en todo momento se le ha exigido su mantenimiento.
Ahora se le abre expediente sancionador por derribo de fachada catalogada sin licencia de demolición, un edificio que se encuentra catalogado con grado de protección P3, limitada a configuración exterior, debiendo por tanto cumplirse lo establecido en las condiciones de protección de la normativa del plan. La demolición de la fachada constituye infracción urbanística grave, siendo su posible calificación como muy grave, según el expediente abierto. Valorándose la fachada derriba como bien inmueble catalogado destruido en la cantidad de 43.000 euros. La posible multa a imponer no podrá ser inferior a 6.000 euros, y se indica que la multa será del cien al ciento cincuenta por cien del valor de lo destruido según la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía. Una resolución que le ha sido comunicada por la Gerencia el pasado día 23 de marzo y ante la que tienen desde esa fecha aún un plazo de alegaciones de 15 días que todavía corre. Pero lo cierto es que ya no tenemos la fachada de la casa de Pérez Carasa.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por Hospitales Pascual