Dulces y sones cofrades en el hospital

El ambiente de Semana Santa también se vive a través de su gastronomía y de sus sones en los hospitales de la capital onubense. Con el objetivo de acercar las tradiciones de Huelva a las personas que están ingresadas en los centros hospitalarios, en fechas señaladas del calendario, como la Semana Mayor o Navidad, se introducen novedades en los menús, consistentes en platos típicos de las fiestas, una iniciativa que se ha mantenido desde el área de Cocina desde sus orígenes.

Los pacientes, hospitalizados en el Juan Ramón Jiménez, Vázquez Díaz e Infanta Elena, disfrutan estos días de las costumbres gastronómicas de la Semana Santa. En las meriendas que se sirvieron el Domingo de Ramos, los enfermos ingresados en el Hospital Juan Ramón Jiménez, aquellos cuyas dietas se lo permitían, pudieron degustar pestiños. Ayer, Jueves Santo se sirvieron en los tres hospitales torrijas y hornazos, dulces que también formarán parte hoy, Viernes Santo, de la merienda que se le ofrecerá a los enfermos. Se distribuirán alrededor de 600 torrijas y de 600 piezas de hornazos.

Además, hoy se elaborará el tradicional menú de vigilia, que contará con platos andaluces, entre ellos, la crema de gazpacho, garbanzos con bacalao, cazón en adobo y piña natural. Entre los platos de la cena se incluirán sopa de picadillo, lubina al horno con guarnición, tortilla de patatas, revuelto de ajetes y gambas, y de postre fruta o natillas con chocolate.

Aparte del apartado gastronómico, los pacientes pudieron disfrutar la pasada semana de la música de Semana Santa, con la sexta edición del concierto cofrade que la Banda Municipal de Huelva, bajo la dirección de Francisco Navarro, ofreció en el salón de actos del Hospital Juan Ramón Jiménez, una actuación que congregó a enfermos, familiares y profesionales sanitarios.

Desde que se puso en marcha esta iniciativa en 2008, la Banda Municipal de Música incluye cada año en su agenda este concierto, que se ha convertido ya en una tradición en el centro hospitalario y que incluso cuenta con su propio cartel anunciador. El programa contempla marchas tan conocidas como Madrugá, Amargura y Campanilleros.

Los centros hospitalarios tratan de este modo, en el marco de su estrategia de participación ciudadana, de acercar las costumbres gastronómicas y culturales de estas fechas a los pacientes que permanecen ingresados haciéndoles partícipes de las mismas, creando en las instalaciones un clima de Semana Santa, de manera que al mismo tiempo que siguen por la televisión las procesiones por las calles de la capital onubense, degustan los típicos dulces.