Educación garantiza la continuidad del colegio Tres Carabelas de Huelva el próximo curso
Huelva
El centro celebrará el día 20 una jornada de puertas abiertas para difundir su proyecto educativo
La Delegación ayudará al colegio de La Orden en su campaña de captación de alumnado
El colegio Tres Carabelas no se cierra. La delegada de Educación, Estela Villalba, ha garantizado la continuidad del centro el próximo curso sin condiciones, sin quedar supeditada al número de alumnos que se matriculen. Acaba así la Junta de Andalucía con la incertidumbre y la amenaza de cierre sobre el colegio de La Orden por el descenso en las matriculaciones y se refuerza la importante apuesta educativa que ofrece este centro, que destaca por ser uno de los más innovadores de Huelva.
Villalba ha hecho el anuncio esta mañana, durante una visita al Tres Carabelas, donde ha refrendado la decisión de la Consejería con la voluntad de "ayudarles en ese impulso que necesitan para seguir adelante con más fuerza si cabe".
Esa ayuda se materializará, especialmente, dentro de una semana, el día 20, cuando el colegio celebre una jornada de puertas abiertas en la que se mostrará su oferta educativa a toda la ciudadanía de la capital y especialmente a los vecinos del barrio, privilegiado en este caso por contar con uno de los centros más destacados a los que se pueden acceder en la ciudad actualmente.
En estos momentos el colegio cuenta con 43 alumnos, según ha detallado la directora del centro, Pepa Mesa, y el grado de satisfacción es altísimo entre los padres, conocedores de una propuesta educativa que va más allá de los libros, como ha subrayado también la delegada de Educación.
"Es un centro en el que se trabaja de manera interdisciplinar, con unos proyectos educativos innovadores en los que se trabaja la educación en valores de manera integrada con los contenidos del curriculum", ha explicado Estela Villalba. "Creemos que este proyecto merece mucho la pena porque es un referente de calidad educativa y porque lo están haciendo muy bien".
La innovación educativa, eso sí, no va unida a un número reducido de alumnos. Lo aclara la directora del centro sin dudarlo: “Esto es posible con 43 alumnos y con 100; solamente es cuestión de organización”. “Para hacer este tipo de cosas –añade– hace falta pararte mucho y organizar todo muy bien, pero es posible”. Y el esfuerzo, asegura, merece la pena. Tienen confianza total en este método de trabajo y quieren llevarlo al máximo número de niños en la capital onubense, creciendo cada año un poco más.
Asegura Pepa Mesa que el objetivo que se han marcado para el próximo curso es, simplemente, “tener un número mayor” de niños matriculados, aunque “si en vez de 43 tuviéramos 60, de momento sería fabuloso para nosotros”. Y para el camino hacia esa cifra mayor han preparado folletos, un vídeo promocional y una intensa presencia en las redes sociales (CEIP Tres Carabelas, en Facebook e Instagram), que tendrá su momento grande el día 20 con la jornada de puertas abiertas: “Invitamos a todas las familias a que vengan a conocer nuestra forma de trabajar”.
Una gran familia entre alumnado y profesorado
Cuenta Pepa Mesa como ejemplo de la idiosincrasia del Tres Carabelas que cada mañana, todos los días, el alumnado es recibido en el colegio entre música y baile de todo el profesorado y la comunidad educativa. Es su forma de “empezar el día con alegría y conseguir que desconecten si alguno llega ofuscado”. Todos participan de este arranque festivo como la gran familia que son. Porque el centro, explica su directora, es todo, más allá de clases y cursos. Todo el profesorado conoce a los niños de todas las edades y todos participan por igual de un sistema que diseña proyectos comunes a desarrollar por todos los cursos. “Ahora acabamos de trabajar con uno que se llama Piensa en verde, con el que hemos hablado a los niños de la importancia del cuidado de las plantas y del medio ambiente”. Hay un cuidado especial por la educación en valores, a través de talleres especializados en arte, en ciencia y experimentación, matemáticas, construcción del lenguaje o biblioteca, entre otros. “Todos los niños van rotando de taller en taller y es mucho más atractivo”. No se da aquí la imagen del niño “sentado cinco horas en clase”. La apuesta educativa es activa e individualizada, también de forma compensatoria, ayudando a los alumnos “que tengan más dificultades”. “Tenemos este tipo de enseñanza porque creemos en ella y porque sólo con el trabajo día a día se consigue que tengan una cultura general”, explica Pepa Mesa. Y esto, recuerda, está al alcance de cualquier familia que busque esta educación en Huelva.
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