De Galaroza a Venezuela, tras la pista de José Blanco y Salazar
Sierra l historia
Este colono serrano se estableció en Venezuela en el siglo XVIII · Gracias a las nuevas tecnologías y a las redes sociales se conocen estos hechos históricos
Cuando se habla de lo que se dio en llamar la gesta descubridora onubense, se suele mirar hacia lugares como el Monasterio de La Rábida, la ciudad de Palos o personajes como los Hermanos Pinzón. Pero también la sierra tuvo su hueco en aquella aventura histórica. Fueron muchos los que fueron desde allí a las Indias en busca de fortuna, y de sus andanzas quedó huella en los tesoros que enviaron a sus lugares de origen. Localidades como Cumbres Mayores atesoran la famosa plata de Indias que sus naturales legaron a su pueblo.
Igualmente Galaroza fue protagonista, como demuestra la investigación que la Asociación Cultural Lieva está desarrollando a ambos lados del Atlántico. Se trata de unas pesquisas que enlazan el pasado con las nuevas tecnologías, demostrando que los caminos de la historia no tienen límite alguno.
A las páginas en Facebook de la Asociación Lieva y de Cachoneros por el mundo, llegó hace varios meses un comentario de Óscar Alberto Pérez Guillén, ciudadano norteamericano, buscando información heráldica de la familia Blanco, que él hacía descender de Galaroza. Decía que su ancestro, José Blanco, fue un conquistador que llego a Venezuela en el siglo XVIII y se inició en la tercera orden franciscana. Al poco tiempo le contestó Delys Guillén-Moreno, venezolano, quién corroboró estos datos e informó de un trabajo de investigación que estaba realizando al respecto.
Inmediatamente, la Asociación Cultural Lieva se puso a trabajar en esta veta histórica y contactó con estas personas para preguntar el alcance de estos trabajos. La asociación serrana se puso manos a la obra desde aquel momento y su socio, José Fernández Tristancho, realizó una gran labor en los archivos parroquiales hasta descubrir los datos originales de la familia. De esta forma, se ha averiguado que el personaje pudo ser un tal Joseph, que nació en octubre de 1690, hijo de Juan M. Blanco y de María Sánchez Salazar. Sus padres contrajeron matrimonio el 12 de Agosto de 1682.
A través de diversas investigaciones, se certificó que este onubense llegó a Venezuela hacia 1704 con un tío materno, Francisco Salazar y Sánchez; allá se hizo hombre y enarboló el estandarte del Imperio Español, conquistando vastas regiones de los llanos occidentales de lo que hoy es Venezuela, y dando origen a una de las familias más relevantes de aquel país.
Su padre, Juan Martín Blanco, habría sido alférez del rey, un magistrado de alta categoría que llevaba antiguamente el pendón o estandarte real en las batallas a las que asistía personalmente el rey, cuyo ejército mandaba en ausencia suya como general en jefe. En 1726, José contrajo matrimonio con su prima hermana Clara Teresa Salazar e Hidalgo-Lozano y tuvo 7 hijos: María Rosalía, José Santiago, Sebastián Fabián, Alejandro, Juan Martín, Juana Josefa y Francisco Antonio.
Tras estas constataciones, se llegó otra pista de gran interés. En la ciudad de San Carlos de Austria, en el Estado venezolano de Cojedes, existe un gran edificio denominado La Blanquera, porque fue propiedad de José Blanco, el colonizador onubense en cuestión. Fue una de sus casas de aposento y su nombre deriva de su apellido cachonero.
La Blanquera es una edificación barroca colonial que data de la segunda mitad del siglo XVIII y en la actualidad es una casa-museo. Fue construida por José Blanco y Salazar después de la conquista de la tierra de Apure y sirvió como casa de retiro y paz para él y su familia después del sometimiento de los indios apureños. Fueron territorios concedidos a él por el rey de España "por haber sido los primeros descubridores de Apure y sus fundadores"
Pero la importancia simbólica de esta casa va más allá, puesto que en ella estuvo en 1821 el libertador de estas tierras, Simón Bolívar, durante 18 días planificando junto a sus generales los detalles de la histórica Batalla de Carabobo, con la que se selló la independencia de Venezuela. En 1961, el libro de José Carrillo Moreno La Biografía de la Casa Blanquera nos da numerosos datos del proceso de ruina y rehabilitación de este edificio que posteriormente albergó la Junta Conservadora del Patrimonio Histórico, el Centro Bolivariano del Estado Cojedes y la Casa de Cultura Cojedeña, siendo hoy un gran museo de historia local y de etnografía de la zona.
La investigación continúa en Galaroza y en Venezuela para tratar de conseguir documentos, retratos y otros rastros de estos cachoneros ilustres. La Asociación Lieva piensa incluso en realizar alguna publicación que recuerde permanentemente esta gesta onubense.
También te puede interesar
Lo último
Navidad en Huelva
Aquellos maravillosos años: Así era Cortylandia en Huelva
Contenido ofrecido por Atalaya Mining
Ocho años de compromiso con el desarrollo de la Cuenca Minera