La Legión levanta entusiasmo
Los militares realizaron un desfile desde la Plaza del Punto a la de las Monjas en ambos sentidos. El Palacio de Congresos se quedó pequeño para acoger el acto central.
La tarde no pudo ser más propicia para que los actos del Día de las Fuerzas Armadas transcurrieran ayer con brillantez, celebrándose bajo el lema Cervantes, soldado de Infantería. Aunque el acto central tuvo lugar en el Palacio de Congresos, la gran demanda de asistencia hizo que los responsables militares optaran por llevar a la calle parte de las celebraciones, lo que fue recibido con alegría por el numeroso público.
Había expectación ante el anunciado desfile de los legionarios. Los integrantes de este cuerpo militar fueron aagasajados con muestras de cariño de los numerosos onubenses que siguieron detenidamente todo lo que se había preparado para la ocasión.
De este modo, los integrantes del Grupo de Caballería Ligera-Acorazada Reyes Católicos de la Legión desfiló, con su guión y banderas, desde la Plaza del Punto hasta de las Monjas, donde presentaron sus respetos a las autoridades militares, encabezadas por el jefe del Estado Mayor de la Fuerza Terrestre, Carlos Gabriel Palacios y el jefe militar de Huelva, Salvador Rosal. Tras interpretar La canción del legionario y lanzar vivas al Rey, España y la Legión, los militares regresaron a la Plaza de las Monjas junto a la Escuadra de Batidores y de la Banda de Cornetas y Tambores del mencionado Grupo Ligero y del 4º Tercio de Ronda. Una vez formados ante el monumento a la Virgen del Rocío, volvieron a entonar La canción del legionario y el himno de este Cuerpo.
El Palacio de Congresos se quedó pequeño para albergar a un público ávido por escuchar los sones ejecutados por la Banda de Guerra del 2º Tercio de Ronda y el Orfeón y la Escolanía de Huelva. Junto a los emotivos momentos del izado y arriado de la bandera nacional, el acto se completó con la conferencia La Virgen del Rocío y el Ejército de Tierra, una peregrinación de más de 13.000 kilómetros, que fue pronunciada por el comandante de Infantería Álvaro Kromer, quien trasladó una imagen de la Blanca Paloma hasta tan lejanos lugares. El evento fue seguido por autoridades civiles como el alcalde de la capital, Gabriel Cruz y el subdelegado del Gobierno, Enrique Pérez Viguera.
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