La Mesa de las Infraestructuras de Huelva se reúne este jueves para cerrar una propuesta de consenso

Huelva/La Mesa por las Infraestructuras de Huelva quiere un documento de consenso definitivo para reivindicar con fuerza todas las obras pendientes que necesita la provincia onubense.

En la última reunión, celebrada hace poco más de un mes en la Diputación de Huelva, no se pudo aprobar por unanimidad el Libro Blanco de las Infraestructuras de Huelva y se decidió establecer un periodo de alegaciones que finalizó el pasado 23 de mayo.

El obstáculo en ese momento fue que una parte de los miembros de esa mesa no estaba conforme con las seis infraestructuras que se habían propuesto en el borrador como prioritarias: desdoble de la carretera nacional N-435, la línea férrea Huelva-Zafra, el AVE Huelva-Sevilla, el aeropuerto, la presa de Alcolea y las infraestructuras eléctricas.

Una de las quejas esgrimidas en esa reunión es que se reivindicaba todo a la misma Administración, al Gobierno central, y no se incluían entre las principales prioridades de los onubenses las infraestructuras sanitarias, como el Hospital Materno-Infantil que se debe desarrollar en la capital onubense, o los distintos chares por la provincia, obras que le corresponden a la Junta de Andalucía. Las seis elegidas fueron las que más votos habían recibido entre los miembros, quedándose cerca estas otras propuestas prioritarias que se eliminaron para concentrar ahora los esfuerzos en un número más reducido de reivindicaciones.

Durante un mes, todos los integrantes de la Mesa por las Infraestructuras han podido presentar nuevas alegaciones al borrador, un periodo ya terminado el pasado 23 de mayo y, según los plazos previstos, una semana después, se celebra hoy esta comisión técnica, a puerta cerrada, para definir el documento según las propuestas realizadas.

La intención clara de los impulsores de esta Mesa por las Infraestructuras de Huelva, cuya parte técnica está siendo realizada por el Consejo Económico y Social de la Provincia de Huelva (CESpH), es que haya un consenso definitivo y que en la reunión de este jueves quede cerrado un documento que satisfaga a todas las partes de esta mesa, entre la que se encuentran todos los partidos políticos y administraciones, los agentes sociales, la universidad y aquellas asociaciones, entidades y particulares que mostraron su interés en formar parte de la misma.

Los impulsores de esta mesa entienden que “todos tendrán que ceder y negociar” para que el documento represente a todas las sensibilidades, pero que es necesario llegar a un acuerdo de provincia para ir con una sola voz a todas las administraciones para reclamar las infraestructuras que necesita Huelva y que están lastrando el desarrollo socioeconómico de la sociedad onubense. Si se llega a ese consenso, habrá un nuevo periodo para elaborar el documento definitivo, el Libro Blanco de las Infraestructuras de Huelva, cuya intención es que sea la hoja de ruta para las reivindicaciones onubenses a partir de ahora.

El plazo previsto para su presentación era, en principio, una semana después de la reunión técnica, sin embargo, debido al periodo electoral en el que se encuentra en estos momentos el país por los próximos comicios europeos, se va a proponer en la reunión de hoy jueves retrasar esa presentación hasta después de las elecciones.