Del Monte Carmelo en Haifa a Huelva
Huelva de ayer a hoy
Patrona de los marineros. La Virgen del Carmen marca el punto álgido del verano, antaño el inicio de la temporada de baños, que llegará hasta la otra fecha mariana, el 15 de agosto: la Asunción
Hoy, que es la fiesta de la Virgen del Carmen, la Patrona de los marineros y Señora de la mar, quiero evocar para compartir ese momento vivido en Tierra Santa en la peregrinación realizada en el mes de julio del año pasado.
El Monte Carmelo desborda en su belleza a lo largo de 26 kilómetros que bordea el Mediterráneo, es la última cresta de la cordillera que corta el valle de Jezreel, y sobre la que se asienta en su orilla la ciudad de Haifa, el principal puerto de Israel.
Esta es una zona tocada, sin duda, por la mano de Dios, su nombre significa en hebreo jardín o viña de Dios, convertido en jardín de robles, pinos, olivos, laurel... Descrito en el Antiguo testamento y hoy incluido por la UNESCO en los lugares Patrimonio de la humanidad, reserva de la biosfera de Israel.
La belleza de los jardines que desbordan en el santuario del Bab, donde están los restos del líder espiritual de esta confesión que pretende unificar en un solo credo todas las religiones monoteístas.
Un espacio sagrado al menos desde el siglo XV a.C. que los egiptólogos lo relacionan con el promontorio sagrado de Maspero, según Tutmosis III.
El Monte Carmelo es un lugar en el que hoy y de la mano del profeta Elías tiene una dimensión universal para las tres grandes religiones monoteistas, judaismo, cristianismo e islamismo.
Se recuerda lo que cuenta el pasaje en Reyes 18: 1-40, cuando Elías se enfrenta a unos sacerdotes de un Dios para él falso, y los desafía a prender fuego invocándole; no lo consiguen y él sí, procediendo luego a la ejecución de aquellos.
La iglesia de Stella Maris se asienta en la cueva en la que la tradición asegura que se escondió Elías tras aquel acontecimiento. Sobre ella hoy se levanta el altar de la Virgen del Carmen de esta iglesia en forma de cruz que se construyó junto al monasterio carmelita.
Este es un lugar muy espiritual, en el que se recuerda a aquel grupo de ermitaños, probablemente hombres de las cruzadas, que fundan aquí en el siglo XII la Orden del Monte Carmelo. La Virgen se apareció el 16 de julio de 1251 a San Simón Stock, en Aylesford, Inglaterra.
La iglesia Stella Maris es un lugar muy devocional, convertido en punto de peregrinación dentro del recorrido por Tierra Santa que nos adentra a una tradición mariana muy entrañable y que en lugares como en nuestra provincia de Huelva alcanza una devoción metida muy adentro en el sentimiento de nuestro marineros.
En los jardines del exterior, un triunfo de la Virgen regalo del pueblo chileno que la tiene por Patrona.
Cruzando la carretera un balcón nos deleita con la mirada en la inmensa bahía de Haifa desde lo más alto.
De celeste inmaculado
La Virgen del Carmen preside la iglesia que se levanta en la que la tradición asegura es la cueva en la que se refugio el profeta Elías. En un altar de mármol aparece la imagen del Carmen de Haifa que se diferencia de las del resto porque luce vestido blanco y manto celeste, que recuerda a su inmaculada concepción, en lugar del marrón y manto crema como se representa al resto de imágenes de esta advocación.
No hay explicación en este cambio, bendecida por Pío XII en 1940, se realizó en 1820, solo la cabeza para ser vestida, y en 1933 el cuerpo como es hoy.
Procesión por la Ría
San Simón Stock es el que comenzó a llamar a la Virgen del Carmen Stella Maris, Estrella del Mar. De ahí que los marineros la tomaran como Patrona. La imagen es de una postal de la procesión de la Virgen del Carmen por la Ría de Huelva, en la que se pueden ver los grandes barcos, remolcadores o la pequeña canoa que llevaba del Muelle de Levante hasta Corrales.
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