Pediatría amplía sus servicios para evitar desplazamientos a Sevilla

Huelva/El Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva amplía sus servicios de Pediatría con la finalidad de ofrecer una atención a los menores cada vez con una mayor complejidad y con menor dependencia del centro de referencia en Sevilla. Por ello, de manera progresiva en los últimos meses se incorporaron nuevas prestaciones en el área diagnóstica, en el ámbito de las subespecialidades pediátricas, -como son las Enfermedades Infecciosas, Endocrinología o Digestivo-, así como diversas mejoras en el área de Urgencias pediátricas. Así se realizan las primeras pruebas diagnósticas complejas infantiles con sedación, como son las endoscopias digestivas altas, que constituían uno de los motivos de derivación más frecuente al Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Esta prueba es empleada en el diagnóstico de enfermedades como la celiaquía, la esofagitis por reflujo o las úlceras pépticas, entre otras.

Esta nueva línea de crecimiento implementada en el Servicio de Pediatría fue posible gracias a la creación de la Unidad de Cuidados Intensivos y la Unidad de Cuidados Intermedios Pediátricos, inauguradas el pasado mes de junio, que posibilitan avanzar en el área de Diagnóstico Infantil para toda la provincia de Huelva.

En estos procedimientos intervienen de manera coordinada los profesionales facultativos y de enfermería de la UCI Pediátrica y de Digestivo Infantil, todos ellos con capacitación específica. Asimismo, continúa la mejora de las prestaciones para la realización de estudios de imagen radiodiagnóstica, estudios neurofisiológicos más avanzados, así como punciones lumbares y medulares en pacientes oncohematológicos en colaboración con otros servicios hospitalarios.

La atención a los menores en el servicio de Urgencias también se ha visto mejorada con la incorporación de un pediatra más de guardia desde el pasado mes de octubre. De este modo, pasa de tres a cuatro el número de pediatras dedicados a la atención de la patología urgente de los menores de catorce años durante las 24 horas del día. Esta medida se extenderá durante el período de alta frecuentación, ligado a la llegada del frío y al incremento de la patología respiratoria, lo que agilizará el tiempo de respuesta y mejorará la calidad de la atención a la patología urgente de los menores de catorce años.

Asimismo, se ha modificado el circuito de atención de los niños que acuden a Urgencias por un traumatismo craneoencefálico o un traumatismo grave, de manera que son atendidos desde el primer momento en el circuito asistencial de urgencias de pediatría permitiendo una observación más estrecha directamente por el pediatra de guardia. Esto supone "un avance cualitativo" en la asistencia, ya que se desliga desde el inicio del circuito general de urgencias de traumatología, donde eran atendidos hasta ahora tanto los adultos como los niños. Se estima que se encuentran en esta situación unos 1.500 menores anualmente.

Por otro lado, dentro del impulso a las especialidades en el área de Pediatría, se ha incorporado la Infectología Pediátrica, dando un nuevo paso en el incremento de las subespecialidades médicas del servicio. Así, la atención de patologías infecciosas como son las enfermedades de transmisión de madre a hijo (VIH, hepatitis B y C, sífilis, entre otras), inmunodeficiencias, adenopatías, tuberculosis, fiebres recurrentes, etcétera, salen del ámbito de la pediatría general para ser diagnosticadas y realizarse el seguimiento en consulta y hospitalización por un pediatra infectólogo.

En el campo de las subespecialidades destaca también la incorporación, en Endocrinología Pediátrica, de una nueva consulta monográfica para el seguimiento de los menores con diabetes mellitus portadores de bombas de insulina. Con esta medida se facilita un control reglado en un espacio asistencial específico del cada vez mayor número de niños y niñas que llevan una bomba para un mejor control de su enfermedad y de su calidad de vida en general.