Pequeños artesanos de la ilusión
La docena de carpas que estos días animan la entrada al nuevo mercado incluyen un animado taller infantil en el que los niños aprenden a fabricar telescopios, portarretratos o lapiceros con sus propias manos
La docena de carpas de artesanía que durante estos días exhiben productos onubenses y llenan de color y vida el entorno del nuevo mercado de abastos de la capital incluye entre sus expositores una propuesta muy especial: un taller infantil en el que los más pequeños fabrican portarretratos, lapiceros y telescopios, entre otras muchas cosas, con material reciclado.
La gaditana Eva María Acuña y su compañero Carrillo entretienen con juegos, malabares y manualidades a los pequeños, de forma que, mientras tanto, sus padres pueden visitar el mercado y realizar sus compras con total tranquilidad.
Aunque una de las animadoras no ha podido trabajar estos días tras haber sufrido un accidente, Eva asegura que los artesanos de toda la feria colaboran y están muy pendientes de los pequeños por si tuvieran que echar una mano en algún momento, ya que se trata en realidad de "una labor conjunta".
Según precisa, no existe un límite de edad determinado para participar en los talleres, ya que "si un pequeño no está capacitado para fabricar un portarretrato, podrá dibujar o rellenar un dibujito con color". Los padres, además, también pueden ayudar, sobre todo si los niños son muy pequeños. Y lo hacen "encantados", ya que ven a sus hijos disfrutar y crear una obra que después podrán llevarse a sus casas para ser utilizadas.
Hasta el próximo 6 de enero permanecerán abiertas todas las carpas en Pescadería desde las nueve de la mañana hasta las diez de la noche, aunque el taller infantil tiene su horario particular: funciona de 11:30 a 13:30 y de 17:30 a 19:30.
Según explicó Acuña, la idea de montar esta feria surgió por la necesidad de que haya un mercado de este tipo que no implique reventas, sino vender artesanía propia. "Ya sabemos que los precios de las obras artesanales son mucho más elevados que si se adquieren otros productos en un polígono o si se realizan compras por dos euros en los chinos. Pero esto requiere más exclusividad y originalidad", recordó.
Con el objetivo de exponer al público lo que ellos mismos han creado con sus manos, los artesanos apuestan por que este tipo de mercados existan "para que proliferen las actividades" de artesanía en un momento en el que, según manifestó, el artesano "se está convirtiendo en una especie en peligro de extinción". Y es que la crisis ha afectado aún más si cabe a las ventas de artesanía, que han caído de forma significativa, ya que "los productos son mucho más caros y la gente no está dispuesta a pagar tanto". Por ello, los artesanos que durante estos días muestran sus obras en Pescadería volverán a unirse para hacer lo propio en Tarifa y en otras localidades en las que se celebren eventos significativos y en fechas propicias.
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