Psicología y salud: ¿Qué es el bienestar emocional y cómo se consigue?

El bienestar emocional es muy importante hoy en día y cada vez se está comprobando más cómo afecta a nuestra salud física. Está demostrado cómo el estrés está matando a las personas y el cortisol es veneno puro para nuestro cuerpo.

El bienestar emocional lo podríamos definir, de acuerdo a las palabras del psicólogo Walter Riso, como “el equilibrio entre cómo me veo a mí mismo, la relación que establezco conmigo como persona y con mis capacidades de gestionar mis emociones, y ese mirarme a mí mismo y el mirar a los otros".

Cuando empieces a ver que vas acercándote a ese equilibrio, uno empieza a sentir que está más tranquilo, más motivado. Esto pasa porque si solo te fijas en ti, en tu bienestar, te quedas en tu ombligo. En cambio, si solo estás pendiente del otro, te olvidas de ti, de tu autonomía y de lo que eres y vales. La libertad positiva es una de los claves del bienestar emocional, en tanto que se define como la libertad interior, aquella libertad de pensar y sentir lo que tú quieras.

Estamos educados en las metas a conseguir y en lo que tenemos que alcanzar, algo que nos quita mucha paz. Si bien es cierto que tenemos que tener un propósito, también lo es el hecho de que lo que no nos enseñan es el camino, es decir, el cómo vas a ir hacia la meta. Una de las creencias que nos quita esa paz llega cuando no sabes diferenciar entre necesidad y preferencia. Esto se explica en que si siento que necesito, siento el deseo de conseguir algo; pero en preferencia significa que tengo entusiasmo, aunque fluyo sin sentirme esclavo de un resultado.

Hay una serie de actividades que nos pueden ayudar a mejorar nuestro bienestar emocional.

La primera de ellas es mantenerte activo. Puedes salir a caminar, bailar, pintar o hacer cualquier tipo de ejercicio que te siente bien. Es importe el encontrar una actividad física que te guste, pues cada vez está más demostrada la importante de la actividad física para evitar el deterioro cognitivo, por ejemplo, para el alzhéimer.

Es importante seguir aprendiendo. Esto se refiere al tener curiosidad en aprender cosas nuevas o, en las cosas que ya sabemos, seguir aprendiendo de ellas. Eso te hace aumentar la confianza en ti mismo.

También cabe destacar el bienestar que genera el acto de dar, es decir, hacer algo por alguien, ya pueden ser extraños o conocidos. Es muy gratificante por cómo te sientes y además te permite hacer nuevas relaciones.

Del mismo modo, hay que conectar con las demás y, para ello, intenta estar con personas positivas que te animen, estimulen, te alegren la vida y te animen a sacar lo mejor de ti.

Más actividades son gestionar la ansiedad excesiva y no intentar hacer miles de cosas a la vez, por lo que tienes que buscar hacer actividades que te ayuden a relajarte como el yoga o la meditación; organizar tu tiempo de trabajo y ocio, siendo generoso contigo y no metiéndote a miles de tareas; y manejar tus emociones, la energía que nos empuja a actuar y afrontar las situaciones de la vida.

A la pregunta de para qué nos sirve todo ello, podemos decir que esto es para tomar decisiones, saber cómo están nuestras relaciones y para saber qué nos conviene y qué no. Ninguna emoción es mala, son necesarias y útiles, son mensajeros que nos cuentan que está pasando y nos dicen si hay algo que tengas que mejorar.

La alimentación también afecta el bienestar. El estómago es como un segundo cerebro y, según nos alimentemos, también nos va afectar a nuestro estado de ánimo.

Cuanto más te conozcas a ti mismo, será más sencillo trabajar ese bienestar emocional, ya que vas a detectar dónde tienes carencias y dónde puedes mejorar.