Salidas de las patronas y dolorosas

La devoción mariana tiene dos momentos importantes de procesiones magnas. La primera de ellas es en 1954, con ocasión de la clausura del Año Santo Mariano y, la segunda, en 1956 con la entrega del título de alcaldesa perpetua de la ciudad de Huelva a la Virgen de la Cinta.

El 8 de diciembre de 1954 se celebra un acto sin precedentes, una gran procesión con las imágenes de las patronas de la Diócesis, presidida por la Inmaculada Concepción, que es nombrada Patrona de la nueva Diócesis de Huelva. En la parroquia de la Concepción se celebró por la mañana solemne misa, en la que se consagró la Diócesis a la Inmaculada. Por la tarde fue la salida de las imágenes desde distintos templos donde fueron acogidas en días anteriores. La crónica señala que "a pesar del mal tiempo, que cuajado en lluvia durante casi toda la tarde, la magna procesión de las vírgenes patronas de imágenes más veneradas de 28 pueblos que, atendiendo al requerimiento hecho por el obispo Pedro Cantero Cuadrado, concurrieron a Huelva, constituyó una grandiosa manifestación de fe y fervor marianos que, difícilmente podrá darse de nuevo en esta provincia". Ciertamente no ha vuelto a celebrarse, aunque sí en 2004 la Hermandad de la Inmaculada organizó una procesión con los simpecados marianos.

A la salida de 1954 acudieron más de 30.000 personas a ver las imágenes de los Ángeles, de Alájar; Los Remedios, de Aljaraque; Piedras Alba de El Almendro; La Granada de Alosno; Las Angustias, de Ayamonte; Los Clarines de Beas; La Inmaculada, de Bonares; La Coronada, de Calañas; El Rosario, de Cartaya; La Esperanza, de Cumbres Mayores, La Estrella de Chucena; El Valle, de Hinojos, El Carmen, de Isla Cristina; La Bella, de Lepe; El Valle, de Manzanilla, El Rosario, de Riotinto; Montemayor, de Moguer; Del Pino, de Niebla; El Valle de La Palma del Condado; Los Milagros, de Palos; El Carmen, de Paterna del Campo; La Peña, de Puebla de Guzmán; La Cabeza, de Puerto Moral, la Asunción de Trigueros; La Blanca, de Villablanca; La Virgen de la Cinta y la Inmaculada Concepción, de Huelva. Todas las imágenes llegaron hasta la Plaza de la Merced, donde se expuso el Santísimo Sacramento y el obispo realizó la bendición. Asistieron las jóvenes con los trajes típicos de sus pueblos, así como los danzantes de Cumbres Mayores, Villablanca y La Puebla; el tamboril de Beas, los campanilleros de Bonares y la orquestina minera de Riotinto, además de la Banda Municipal.

El otro gran acontecimiento mariano vivido por la ciudad tuvo lugar con ocasión del nombramiento, el 29 de agosto de 1956 de la Virgen de la Cinta como alcaldesa de la ciudad de Huelva. El acto de entrega tiene lugar el 7 de septiembre a las puertas del Ayuntamiento, por el alcalde Antonio Segovia Moreno, siendo hermano mayor Francisco Vázquez Carrasco. La Virgen de la Cinta había sido trasladada ese año a la Santa Iglesia Catedral para su novena, aunque para el acto de la entrega se llevó a Las Agustinas. Tras la entrega del título de alcaldesa se organizó una gran procesión hacia la Merced, en la que participan los pasos de las dolorosas de Huelva: Nuestra Señora de los Ángeles, Virgen de la Paz, María Santísima del Refugio, Nuestra Señora de los Dolores de la Merced y María Santísima de la Amargura. Se organizó una gran procesión con presencia de las congregaciones marianas y representación de todas las hermandades de la ciudad, cruces parroquiales y comunidades religiosas.

Abría marcha la Banda de la Cruz Roja, en el cortejo iba la Banda de Música del Asilo de Ayamonte, cerrando el paso de la Virgen de la Cinta.