Abel Moreno emociona con 'La Madrugá' al recibir la Medalla de Andalucía: "Tengo la suerte de ser profeta en mi tierra, Huelva"

Huelva/El músico y compositor onubense Abel Moreno, natural de Encinasola, protagonizó este 28 de febrero uno de los momentos más especiales del acto de entrega de distinciones con motivo del Día de la comunidad andaluza. Moreno, que este 2025 ha sido galardonado con la Medalla de Andalucía de las Ciencias Sociales y las Letras, emocionó en el Teatro de la Maestranza de Sevilla interpretando su marcha cofrade más universal, La Madrugá, junto a la banda de música de la Sociedad Filarmónica Oliva de Salteras.

"Gracias a Dios he recibido diversas distinciones a lo largo de mi carrera, que ha sido muy larga, porque ya tengo 80 años, pero yo creo que la Medalla de Andalucía es el culmen para todo andaluz, y para mí no iba a ser menos, que como marocho y onubense me he sentido siempre orgulloso de mi Andalucía", contaba con emoción a Huelva Información.

"Estoy muy agradecido a la Junta de Andalucía por haberse acordado de este músico y además de la Semana Santa", aseguraba. Un premio que le anima a seguir trabajando, porque a pesar de los éxitos y de su dilatada trayectoria, Abel Moreno sigue en activo y deseoso de seguir poniéndole música a la Semana Grande que se avecina. "Ahora cuando llega la Cuaresma casi todos los fines de semana tengo compromisos. Este año tengo que ir hasta Logroño y Guadalajara para dar conciertos y así estaré hasta que Dios quiera y yo pueda. Uno no se cansa a pesar de llevar toda la vida dedicado a ello. Siempre lo he dicho: si uno trabaja en lo que le gusta, para él no es trabajo. Y además a mí me viene muy bien, porque así estoy más activo", afirma.

Siempre se ha sentido respaldado por Huelva. "He oído decir que nadie es profeta en su tierra, pero conmigo ha ocurrido lo contrario. En mi pueblo, Encinasola, tengo una calle con mi nombre, además de una banda de música y un aula musical. Tengo también la Medalla de la Provincia, la Medalla de Huelva y el Premio Onubense del Año de Huelva Información. Rotundamente, yo sí me siento profeta en mi tierra. Y ahora, además, recibo la Medalla de Andalucía en Sevilla, otra ciudad que siento como mía. No me puedo quejar".

Cuando se subió al escenario a recogerla, confiesa, se le vino a la cabeza su padre. "Mi padre con cuatro años me sentó en el piano y me inculcó el amor por la música". Ahora su "única pena" es que él ya no esté para ver cómo le entregaban la Medalla, "pero la vida es así".

50 años desde su primera composición

Cuando era estudiante ya hacía composiciones de Huelva. "Siempre lo he dicho. Mi primera marcha procesional fue dedicada a la Virgen de las Flores, Patrona de mi pueblo, en el año 1976, que precisamente en 2026 se cumple el 50 aniversario de aquella primera composición. Esa fue mi primera marcha y en ese mismo año también compuse mi primer pasodoble, dedicado a mi pueblo, Encinasola. Luego ya vinieron muchos otros". Y entre ellos, su obra estrella, La Madrugá.

Dice Abel que es el público el que decide el éxito de una obra. "Nosotros los compositores componemos y nuestra ilusión es que guste a todos. Sin embargo, unas veces tiene más éxito y otras...no tanto. Resulta que La Madrugá fue todo un éxito y además mundial, porque en todas partes se toca. Ha sido la banda sonora ya de muchas películas. La última vez que me la han pedido ha sido para una serie portuguesa". Cuenta el onubense que desde el principio, cuando la estrenó, la reacción de todo el público fue diferente a la del resto de sus otras composiciones. "Estuve con la banda la Inmemorial del Rey en la ópera de Niza y tras haber tocado durante todo el concierto obras de Falla, Albéniz y un gran repertorio de música española, fue con La Madrugá con la que se puso todo el teatro en pie. Entonces me di cuenta de que tenía algo especial", rememora.

El secreto del éxito, asegura, está en que cuando suena "cada uno siente su madrugá". Él siempre dice a su público que la escuche "con los ojos cerrados, porque a cada uno le hace sentir de una manera distinta. Es una música que inspira mucho".

Aunque si le preguntan por el encargo más especial que ha tenido en su carrera, sin duda, afirma que es el Himno de Huelva. "Me gustan todas las que he compuesto porque todas las he creado con ilusión, pero no me puedo olvidar del Himno de Huelva, del que me siento profundamente orgulloso". Un himno del que guarda un bonito recuerdo al ser cantado por primera vez por su amigo y gran tenor, recientemente fallecido, Guillermo Orozco.

A día de hoy, ya poco le queda por conquistar a Abel Moreno. Con una sonrisa de oreja a oreja confiesa que "de mi tierra, hasta ahora, he recibido todo". Su único deseo es seguir trabajando "con la misma ilusión que tenía aquel niño de cuatro años que tocaba el piano junto a su padre". Adelanta que próximamente irá a Málaga "porque Antonio Banderas le puso letra a una marcha que yo hice para su hermandad, la de Lágrimas y Favores". En paralelo seguirá con otros muchos encargos. Más de los que, revela, a él le gustaría a su edad. "Ya no quiero explayarme demasiado. Tengo más de 150 marchas profesionales y creo que es una cifra considerable", celebra.