"Nos tendremos que acostumbrar a tener peores servicios públicos"

Recortes en el gasto público, flexibilización del mercado laboral y el reto fundamental de la mejora de la competitividad por bandera. Esas fueron algunas de las propuestas desgranadas ayer en el Foro de debate Gerardo Rojas, organizado por Huelva Información, frente a una crisis financiera y de deuda pública que tiene a la sociedad europea "bastante cerca del precipicio". Tanto que, según advirtió el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Sevilla y miembro del Consejo Editorial del Grupo Joly, Francisco Ferraro, cualquier variable inesperada puede desembocar en la quiebra de Grecia, para llevar a Europa a una situación "inimaginable".

Según recordó Ferraro, las perspectivas económicas son malas; es posible que ya estemos entrando en recesión y para el último trimestre de este año y el primero de 2012 haya una nueva contracción de la actividad económica. Se avecina "un tiempo complicado", tras el cual sólo se puede aspirar a una recuperación "no potente" porque el desajuste financiero internacional proseguirá, impulsado ahora por el problema de la deuda soberana. La crisis de la deuda pública y la falta de eficacia en la respuesta europea ante la misma han copado la actualidad en los últimos meses, poniendo en duda un sistema del euro construido sobre el "voluntarismo político" pero sin un sistema fiscal común y con una demostrada lentitud a la hora de tomar decisiones de importancia.

Frente a ello, "aquí podremos hacer poco, pero sí podemos hacer algo". Llega el momento de las restricciones, con unas administraciones al borde de la quiebra ahora en el ojo del huracán. Ninguna se salva, desde los ayuntamientos, que, como reconoció el alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, se han quedado con lo justo para pagar a los funcionarios "y no podemos pagar a los proveedores y servicios públicos", a la Junta de Andalucía, que también acumula deuda con las empresas. Frente a ello, voces como la de Rafael Ávila que piden un "contador a cero" para bancos y administraciones con una estricta supervisión y condiciones y otras, como la del gerente de la Universidad, Antonio Morilla, que recuerdan que ya se condonó la deuda municipal en los años 80 "y no funcionó".

En pleno debate político sobre los recortes aplicados por diversas comunidades autónomas y el Gobierno central, Francisco Ferraro, también presidente del Observatorio Económico de Andalucía, abogó por la reducción de gasto público: "Creo que tendremos que acostumbrarnos a tener peores servicios públicos", señaló, "habrá que plantearse si España se puede permitir tener el Metro más cómodo, limpio y, además, barato. Si no podemos, habrá que priorizar y, por lo pronto, reducir". Al mismo tiempo, habría que aumentar los ingresos, en este caso vía impuestos que graven a quienes más tienen, como el de Bienes Inmuebles, aseveró el catedrático. Y sin llegar al "espectáculo desgarrador" que se da en España desde hace tiempo, en el que "el PP se opone al recorte de las pensiones o el ajuste de los sueldos de los funcionarios" y el PSOE recupera ahora "el impuesto de Patrimonio o azuza a los profesores".

Reducción de servicios públicos pero también de empleo en las administraciones. En el lado de lo público, el alcalde de Huelva expuso un problema local, el sobredimensionamiento de la administración en un momento en el que no hay actividad: "Tenemos una Gerencia de Urbanismo preparada para cuando se daban 2.000 licencias al año; ahora hay cuatro". Y frente a la disminución de ingresos municipales, Francisco Ferraro advirtió sobre la distribución de gasto: "Es preferible recortar el gasto en funcionarios que no pagar a los proveedores". Aunque lo primero es más difícil que lo segundo, afirman otras voces, que asintieron cuando el rector de la Universidad de Huelva, Francisco José Martínez, señaló que uno de los problemas para potenciar la inversión empresarial es la inflexibilidad del mercado laboral: "Nuestro sistema laboral tiene que ser cambiado radicalmente", aseguró el rector.

El mercado laboral tiende a un aumento del número de autónomos, frente al "país de gorrones sociales" actual, aseguró Ferraro en referencia a la elevada picaresca y fraude existente. Como muestra un botón: en Sevilla, "hay una tasa de incapacidades propia de una sociedad de posguerra". Un ejemplo más de "irresponsabilidad individual", uno de los "comportamientos perversos" a los que apunta Ferraro como elemento individual a cambiar para salir de la coyuntura negativa. "La gente no es responsable de su vida", sino que ha depositado su responsabilidad en las administraciones, algo fomentado "por los políticos, que prometen y regalan porque es lo que vende". Pedro Rodríguez asiente: "La gente está adormecida y no tiene capacidad para reaccionar ante esta situación". Y mira a los políticos, que "intentan evitar desgracias", explicó Ferraro, aunque al actuar hayan impedido la corrección del problema esencial, la exuberancia financiera", ya que "para resolver la crisis habría que haber permitido una suspensión de pagos generalizada, pero los políticos no podían permitir el efecto inmediato, la bancarrota". Aunque, apostilló el catedrático, "tampoco se puede asegurar que esa terapia de choque hubiera salido bien".