Alarma por una oleada de robos y destrozos en casas de labranza en Berrocal: "Es necesaria más presencia de la Guardia Civil"

Los vecinos de Berrocal han dicho basta. Una oleada de robos y destrozos en casas de labranza estos últimos meses ha llevado al Ayuntamiento de este pequeño municipio de Huelva a denunciar públicamente lo que vienen sufriendo desde hace un año los vecinos del pueblo. Aunque en algunos casos se ha dado también robo de ganado, más que por el material sustraído, alertan del coste económico que les reportan los asaltos por los daños sufridos en la propiedad y, más aún, por la sensación de inseguridad que genera en todo Berrocal.

Las propiedades afectadas, según ha comunicado el Ayuntamiento de Berrocal en una nota, son, en su mayoría, casitas rurales diseminadas por el término municipal, asociadas a huertos y pequeñas fincas forestales. Éstas suelen contener pocos muebles, algún trofeo de caza antiguo y placas solares para iluminación. Sin embargo, estos bienes, aunque de escaso valor económico, no han disuadido a los delincuentes, quienes también han robado ganado de las fincas. Afortunadamente, indican, hasta ahora, ninguna vivienda ha sido asaltada mientras los propietarios estaban dentro.

El impacto de estos robos no solo recae en la pérdida de bienes, sino en los graves destrozos ocasionados: rejas, puertas y ventanas arrancadas, y un caos absoluto en el interior de las casas. Esto ha supuesto un enorme coste económico para los afectados, quienes, en algunos casos, han sufrido hasta tres robos en un corto período de tiempo.

"Más vigilancia en zonas rurales"

Ante esta situación, el alcalde de Berrocal, Ángel Romero, ha intensificado los contactos con la Guardia Civil, insistiendo en la necesidad de que los afectados presenten denuncias formales. Según Romero, esto permitirá no solo documentar los robos, sino también justificar una mayor presencia policial en el municipio. “Es indispensable contar con más vigilancia en las zonas rurales, donde los caminos facilitan el acceso a las viviendas”, afirmó el alcalde.

El Ayuntamiento, por su parte, ha elevado el problema a instancias superiores, solicitando colaboración para encontrar soluciones reales y legítimas que permitan frenar esta situación. Según Romero, “seguiremos trabajando hasta conseguir un compromiso firme que garantice la seguridad de nuestros vecinos”.

Mientras tanto, el municipio vive una situación de alarma y desesperación, con una ciudadanía que exige medidas concretas y urgentes para poner fin a esta preocupante ola de robos.