Un año desde Bernard: Así vivió Huelva el paso de la borrasca que acabó con un fallecido y múltiples daños
Caídas de árboles, cables colgando e inundaciones fueron algunos de los múltiples incidencias que tuvieron con el corazón en un puño a los onubenses
Las fuertes lluvias inundan las calles de algunos municipios de Huelva: espectaculares imágenes de Cartaya y La Antilla
Huelva/Ha pasado un año desde el paso de la borrasca Bernard por Huelva, pero el recuerdo de los momentos de tensión vividos y las imágenes de los destrozos en las calles onubenses tras momentos de tensión continúan en la memoria de todos. Caídas de árboles, cables, mobiliario urbano, obstáculos que pusieron en peligro la circulación... Múltiples incidencias que tuvieron con el corazón en un puño a muchos vecinos.
Durante el temporal se alcanzaron rachas de viento que superaron los 100 kilómetros por hora en la capital onubense e intensas lluvias que sumaron una precipitación acumulada de hasta 88 litros en Cartaya y 86 litros en El Campillo, más otros 84 litros recogidos en Valverde del Camino. En ningún otro punto de Andalucía se ha recogido más agua, según los datos que se recogieron en la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
En total se registraron más de 200 incidencias registradas por el Servicio de Emergencias del 112 concentrando el mayor número a partir de las 15:00, sobre todo en la capital onubense. Según las primeras valoraciones que dió el consistorio tras la borrasca se derribaron en la ciudad alrededor de 500 árboles.
Además de en al capital de provincia, los municipios más afectados fueron Isla Cristina, Ayamonte y Lepe, aunque también se registraron incidencias en Aljaraque, Almonte, Beas, Cartaya, El Campillo, Escacena del Campo, Gibraleón, Higuera de La Sierra, La Palma del Condado, Lepe, Minas de Riotinto, Moguer, Aracena, Punta Umbría, Rosal de La Frontera, San Juan del Puerto, San Silvestre de Guzmán, Trigueros, Valverde del Camino, Villablanca y Villanueva de Los Castillejos.
Daños en la capital
La caída de árboles, desprendimientos y daños en el mobiliario urbano provocaron numerosos incidentes. En la calle Gonzalo de Berceo, dos vehículos fueron aplastados por el tronco de un árbol, una situación que se repitió en varios puntos de la capital con caídas que invadieron la carretera provocando el corte de zonas como la avenida Pío XII. También se registraron caídas y desprendimientos de ramas en la calle Hermano Palomo, en la Plaza Galatea, en la calle Doctor Cantero Cuadrado, en calle Fuenteheridos, Paseo de Las Palmeras, cuesta de las Tres Caídas, calle San Sebastián o calle Duque de Ahumada, entre otras. En estos casos no hubo que lamentar daños personales en estos casos.
Las lluvias también provocaron inundaciones en varios puntos de la ciudad como en la Avenida de Alemana, en la que emergencias tuvo que coordinar un aviso de un coche que había colisionado con un contenedor, que flotaba en la calle que se encontraba completamente anegada.
Daños en municipios de la provincia
Además de en la capital, muchos municipios tuvieron que hacer frente a los daños ocasionados por Bernard. Desde el Consorcio Provincial de Bomberos, junto con el Servicio de Carreteras y Caminos, registraron decenas de intervenciones, incluso con rescates de personas atrapadas en vehículos.
Los trabajos comenzaron a las 16:25 y desde ese momento, no cesaron; sobre las 20:00 ya se habían contabilizado 30 incidencias atendidas por toda la provincia. Tuvieron que ser rescatadas varias personas atrapadas por el agua dentro de sus vehículos en Ayamonte, Isla Cristina, San Bartolomé de la Torre y Moguer.
La borrasca se cobró una vida
El domingo 22 de octubre de 2023 se dio la nota más amarga al fallecer una persona al quedar atrapada en su vehículo por un desprendimiento en consecuencia del temporal en Trigueros. El vehículo circulaba por el Camino del arroyo Sequillo cuando se desprendió una de las paredes provocando que quedase semivolcado en la cuneta.
La víctima no pudo salir del vehículo y los efectivos del Consorcio Provincial Contra incendios y Salvamento tampoco pudieron hacer nada por salvar su vida.
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