El boicot a la fresa de Huelva atenta contra uno de los pilares de su economía
Los frutos rojos generan alrededor de 100.000 puestos de trabajo directos y supone el 9% de todo el PIB provincial
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La campaña iniciada en Alemania para recoger firmas con las que solicitar un boicot a las fresas de Huelva atenta de forma directa contra uno de los grandes pilares de la economía onubense. El sector de los frutos rojos de Huelva es uno de los principales generadores de riqueza provincial. Según los datos de la última campaña cerrada, la correspondiente a la 21/22 ya que la actual se encuentra todavía en su recta final, alrededor del 9% del PIB onubense depende de los frutos rojos. Es un segmento que genera 100.000 puestos de trabajo directo y 60.000 indirectos. Su impacto en la economía onubense es más que evidente.
La iniciativa puesta en marcha en la plataforma Compact pretende reunir 200.000 adhesiones a título individual con las que presionar a las principales distribuidoras de alimentación germanas a negar la compra de fresas onubenses. Algunas de ellas como Aldi se ha desmarcado de cualquier respaldo. Incluso debía comenzar este lunes una visita de una comisión de parlamentarios alemanes sin ningún tipo de competencias en la materia para analizar la labor de los agricultores onubenses. El parlamento germano desautorizó el viaje.
La iniciativa carece de sustento y basa su argumentario en un relato construido desde el exterior y tópicos asumidos como ciertos sin ningún fundamento. El conflicto generado y el ruido político por la propuesta de regulación de regadíos actúan como mecha para activar un ataque directo a la economía onubense. En realidad es una batalla recurrente a la que los agricultores onubenses se enfrentan de forma periódica. Doñana no es más que la excusa, puesto que ninguno de los argumentos con los que se sustentan los ataques se sostiene. Así lo entiende Rafael Domínguez, gerente de Freshuelva, quien sostiene que se trata de “una lucha comercial que coincide con llegada al mercado de productos de otros países e incluso entre las propias cadenas que nos usan como arma arrojadiza”. Consideran los freseros que Doñana “no es más que una excusa por el impacto mediático que tiene”. Domínguez lamenta que "tenemos que enfrentarnos a este tipo de situaciones cada cierto tiempo, lo cual cansa". Los agricultores de Huelva "son una garantía de buen hacer, tienen todas las certificaciones y estamos cansados de tener que justificarnos".
Interfresa por su parte recuerda que “el 100 % de las fresas y los frutos rojos exportados cuenta con la certificación Spring de Globalg.A.P IFA para cultivos, que avala a productores y comerciantes en la gestión legal, eficiente y responsable del agua que usan para el riego". Los propios supermercados alemanes exigen esta certificación, entre los que se encuentran los más relevantes Rewe, Aldi, Lidl, Edeka y Kaufland. En el resto de Europa también lo piden los británicos Tesco, Marks and Spencer y Sainsbury's; los franceses Carrefour y Auchan; o los suizos Migros y Coop, entre muchos otros. Curiosamente la campaña aparece en un momento en el que los mercados alemanes se nutren de una mayor cantidad de fresas de otros países como Grecia.
Actualmente, Globalg.A.P. es el programa de aseguramiento líder en el mundo, logrando que los requerimientos del consumidor se vean reflejados en la producción agrícola en una creciente lista de países (actualmente más de 135 en todos los continentes). Entre los criterios que se evalúan para la certificación Spring están la conformidad legal de las fuentes de agua y tasas de extracción, el seguimiento del consumo de agua, el impacto de los productores en la gestión sostenible de cuencas hidrográficas, las mejores prácticas en la gestión del agua, la protección de fuentes de agua y las medidas que demuestren que se mejora continuamente la gestión del agua.
El riesgo para Huelva es considerable. La provincia es la principal productora de frutos rojos en España, al concentrar el 98% de la producción nacional y cerca del 30% de toda Europa. Las exportaciones suponen casi 1.400 millones de euros, suponiendo el mercado alemán más de un tercio del total del mercado exterior del sector con casi 500 millones de euros. Para la comarca del Condado de Huelva su impacto es mucho mayor, al ser el principal medio de vida de los pueblos que la integran.
Los instigadores del boicot hablan de fincas irregulares y extracción ilegal de agua sin más fundamentos que las versiones recogidas de colectivos ecologistas. El fondo de todo es Doñana y los problemas que padece el espacio natural por la falta de agua que la dura sequía ha provocado. Ante un escenario que golpea por igual a todos los sectores, la plataforma germana ha aprovechado para lanzar un boicot directo contra la producción fresera onubense. Obvia el impacto que sobre el acuífero provocan otros agentes, núcleos urbanos, el turismo o la falta del aporte natural del Guadiamar. Tampoco reconoce que la falta de infraestructuras alternativas es el gran problema al que se enfrenta la agricultura onubense.
La realidad es que según los datos técnicos con los que trabajan la Junta de Andalucía y las organizaciones agrícolas, solo el 8% de toda la superficie en regadío de la corona norte de Doñana estaría sujeta a un estudio para su regulación, que no la garantiza sin cumplir una serie de requisitos. Significa alrededor del 6% del total de la provincia. En total son 759 hectáreas. Significa que el 94% de todas las plantaciones de frutos rojos de la provincia de Huelva cumplen con todos los requisitos y obtienen el agua de forma completamente legal. Cifra que se eleva al 99% si se incluyen todos los frutos. Pero es que ese 6% restante estaría en objeto de estudio con la regulación de regadío, lo que eliminaría cualquier uso irregular.
En cuanto al uso de pozos ilegales, la previsión de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que es un organismo dependiente del Gobierno central, es que en 2025 no se extraiga una sola gota de agua para el regadío de forma irregular. Es una realidad que podría haberse producido incluso antes si se hubiesen cumplido con las infraestructuras programadas para la sustitución del agua subterránea por la superficial. Si todavía quedan pozos en la corona norte es porque no se han aportado las soluciones prometidas.
Los promotores de la campaña, al igual que sucede con la mayor parte de los grupos ecologistas que alimentan el relato, omiten que la agricultura intensiva onubense es referente internacional en aprovechamiento de agua o que la provincia está a la espera de la ejecución de una ley de trasvases que aportaría el agua superficial suficiente. La ejecución completa del trasvase de 19,99 hm³ desde la cuenca del Tinto-Odiel-Piedras así como el recrecimiento de la presa del Agrio para sumar otros 8 hm³ garantizan el suministro necesario para el cierre de todos los pozos y la recarga de los acuíferos de la zona. Sin embargo, la situación actual de sequía sirve un escenario ideal para construir un relato que identifique a los agricultores como responsables únicos.
Apoyos desde todos los sectores
La respuesta a la campaña de desprestigio y el intento de boicot a los frutos rojos onubenses encontró una respuesta unánime desde todos los sectores. "No podemos compartir la campaña de descrédito con la agricultura y un producto muy importante para el campo de Huelva", ha señalado durante su intervención en la clausura de la asamblea de ATA el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi. "Somos contrarios a los boicots (...) es compatible el campo con el medioambiente", ha añadido Garamendi, que ha pedido no utilizar el "sustento de muchas familias".
La Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) expresa "su rotundo respaldo a las empresas y profesionales del sector de la fresa y los frutos rojos de Huelva, provincia líder en el mercado internacional, en la que la Asociación Interprofesional de la Fresa Andaluza (Interfresa) es una referencia sobre el uso legal y eficiente de agua en la producción".
CEA se solidariza "con este colectivo esencial del tejido empresarial onubense, víctima de mensajes falsos que han cuestionado sin fundamento el estricto cumplimiento de la legalidad por parte de sector de los frutos rojos en Huelva, así como su compromiso con el desarrollo sostenible de la provincia".
Todos los partidos políticos se han sumado igualmente a esta defensa así como la población de forma masiva con el lema 'yo como fresas de Huelva'.
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