Cae la banda de aluniceros más importante del sur de España, con más de cien robos en Huelva y otras siete provincias

Más de cien robos en comercios, por un valor de medio millón de euros, en Huelva y otras siete provincias. Es el bagaje delictivo de la banda de aluniceros más importante del sur de España, que operaba hasta ahora de forma muy activa en Andalucía y Extremadura. Una operación conjunta entre la Guardia Civil y la Policía Nacional, denominada Sauro Mole, ha logrado ahora desmantelar el grupo de delincuentes, tras más de un año de investigación, que se ha saldado con la detención de ocho individuos.

La organización criminal, de un alto nivel profesional, según detallan los dos cuerpos en una nota, se dedicaba al robo con fuerza en establecimientos públicos, mediante el método del alunizaje con coches, y al robo y hurto de vehículos a motor. Además se le atribuyen delitos de falsedad documental, por la utilización de placas dobladas, y tenencia ilícita de armas. Su ámbito de actuación era el de las provincias de Huelva, Sevilla, Cádiz, Córdoba, Granada, Málaga, Jaén y Badajoz.

Los agentes han llevado a cabo hasta 15 registros domiciliarios en los municipios de Sevilla, Alcalá de Guadaíra, Umbrete y Utrera, todos en la provincia sevillana, en los que se ha intervenido material de telecomunicaciones e informático, herramientas utilizadas para la comisión de los hechos delictivos, efectos sustraídos de los diferentes robos, y dos armas de fuego. También han hallado dos plantaciones con un total de 363 plantas de marihuana.

La investigación policial comenzó en junio de 2023, cuando los agentes tuvieron conocimiento de una serie de robos con fuerza en la provincia de Cádiz, en dos establecimientos en Palmones-Los Barrios. Tras las primeras indagaciones se logra identificar a los autores de estos hechos, así como los vehículos utilizados para perpetrar los robos.

Los movimientos de dichos individuos fueron seguidos durante varios meses, así como el de los diferentes vehículos utilizados durante la comisión de sus actividades ilícitas, permitió a los investigadores concluir que estaban tras un grupo criminal presuntamente responsable de delitos similares en diversos lugares de las provincias de Cádiz, Córdoba, Sevilla, Granada, Huelva, Málaga, Jaén y Badajoz.

Los establecimientos estaban dedicados a la venta al público de todo tipo de género, desde secaderos de jamones, estancos, tiendas de telefonía, de moda y material deportivo, hasta cadenas de perfumería, bazares orientales o pequeñas tiendas de ultramarinos.

Extraordinaria profesionalidad de los aluniceros

Desde Guardia Civil y Policía Nacional se subraya su elevada "profesionalidad", y para ello destaca "la rapidez de ejecución" de sus acciones, después de registrarse hasta diez robos en menos de una semana, en solo seis días.

En estas acciones ocultaban su identidad con pasamontañas, gorros y guantes. Incluso en algunos de los robos, uno de los miembros portaba un extintor para usar contra el personal de seguridad, en caso de ser sorprendidos, con el objetivo de ganar tiempo suficiente para emprender la huida.

Esa extraordinaria profesionalización de la banda de aluniceros que destacan los investigadores se ha observado también en los roles definidos de cada miembro de la banda en la ejecución de los robos. Todos jugaban su papel y no se salían del guion establecido en ningún momento, sin lugar a la improvisación: conductor y/o alunicero, vigilantes de zona para no ser sorprendidos, especialista en apertura de puertas o fracturas de escaparates y cargadores de la mercancía sustraída al vehículo utilizado.

Para sus desplazamientos utilizaban vehículos de alta gama que eran robados o hurtados previamente, algunos de ellos con colocación de placas falsas, para la comisión de los delitos, de manera que pudieran huir a gran velocidad del lugar de los hechos, con el consiguiente riesgo para la seguridad vial.

La valoración aproximada de los objetos sustraídos alcanza el medio millón de euros, con grandes pérdidas sufridas por los propietarios de los establecimientos robados. A esta cantidad habría que sumarle los gastos ocasionados en la reparación o sustitución de los daños provocados. La reiteración de los robos al mismo establecimiento, obligaba en algunos casos, al cierre del comercio, por no poder afrontar los elevados gastos ocasionados, con la consiguiente pérdida de puestos de trabajo.

La investigación ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Algeciras (Cádiz). La operación Sauro Mole ha sido explotada por las Áreas de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de las Comandancias de la Guardia Civil de Algeciras, Sevilla y Córdoba, junto al Grupo de Delincuencia Organizada Patrimonial de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV II) de la Brigada Provincial Policía Judicial de Policía Nacional de Sevilla y la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Brigada Local de Policía Judicial de Policía Nacional de Jerez de la Frontera (Cádiz).