El CEUS se abre a los futuros talentos de Huelva y otras provincias para que se formen en un centro puntero en Europa

El CEUS del Instituto Nacional de Técnicas Aeroespaciales (INTA) ya opera en Huelva y lo hace como uno de los centros de ensayos de sistemas aéreos no tripulados y de certificación de drones más potentes a niveles europeo y mundial. Una de las fortalezas de este proyecto clave para el sector aeronáutico en Europa es la apuesta por la formación de calidad, de la que el talento onubense se verá beneficiado.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no quiso dejar pasar por alto durante la inauguración del CEUS las oportunidades formativas y laborales que trae consigo esta infraestructura científica-técnica, pues ofrecerá empleo de calidad y formará "talento", dado que allí harán prácticas "los alumnos de formación profesional aeronáutica" de la provincia de Huelva, lo que supondrá la profesionalización de "jóvenes de la provincia, que harán más robusta nuestra industria aeroespacial". Asimismo, destacó la colaboración entre instituciones públicas para alcanzar esta "meta ilusionante" y agradeció el "interés y comprmoiso con nuestro país" a los representantes de empresas vinculadas con el mercado tecnológico y aeroespacial allí presentes, como Airbus, Indra, Sener o Aertec. A ellas les animó a "usar estas instalaciones para sus ensayos" porque "además aquí van a encontrar algo muy preciado, como es el talento".

Sobre las actividades formativas, la secretaria de Estado de Defensa y presidenta del INTA, Amparo Valcarce, informó este martes que estarán dirigidas, por un parte, a las Fuerzas Armadas, pero también a universidades, centros de formación y empresas del sector, así como a futuros investigadores del ámbito de Ciencias de la Tierra, Agricultura, Geología, Atmósfera o Medio Marino. Sin olvidar a los alumnos de Formación Profesional de Aeronáutica, partes del tejido educativo local y regional.

El CEUS, proseguía Valcarce, servirá "de soporte a las necesidades de las comunidades de ensayos de aeronaves, tanto en tierra como en vuelo, y como espacio de investigación en todos los ámbitos del mundo de los drones". Y no solo eso. Supone un "gran impulso para la industria aeronáutica, un gran generador de empleo de alta cualificación profesional y una infraestructura que proporcionará sustanciales retornos de la inversión y que ejercerá un importante efecto tractor en las economías local, regional y, por supuesto, española".