Así es Concha, la mujer que "cautivó" a Óscar Puente pidiéndole la llegada del AVE: "Estoy feliz de que mis hijos puedan llegar a disfrutarlo"

Hay algo en la mirada de Concha que la hace diferente. Es de esas personas que desprenden magnetismo, que contagian las ganas de vivir. Quizá eso, unido a su talante firme y decidido fue lo que cautivó al mismísimo ministro Óscar Puente. Y es que no es baladí que el titular de Transportes del Gobierno se citara con ella el pasado mes de enero, durante su última visita oficial a Huelva, tras recibir un simpático mensaje de la onubense confesándole "que tenía ganas de conocerle".

Así lo cuenta ella. A sus 86 años Concha Pérez Blanco, recién salida de la peluquería y con un look impecable, relataba a Huelva Información el curioso vínculo con el ministro que la ha llevado a convertirse -por mucho que ella se resista- en el icono de la inminente llegada del AVE a Huelva. Pero comencemos por el principio. "Verás, yo había oído hablar mucho de Óscar Puente cuando era alcalde de Valladolid. Yo tengo allí una prima hermana, casada con un catedrático civil, y ella me hablaba muy bien de él. Me contaba que como alcalde siempre fue alguien muy cercano y accesible. Después, cuando lo nombraron ministro, seguí su carrera, porque a mí siempre me ha encantado estar al tanto de la política", relataba Concha.

La de Huelva confesaba que le gustó de Puente "su honestidad" y que lo veía parecido a ella en algún sentido: "Es muy trabajado y no tiene filtros, como yo". Y precisamente como Concha es alguien sin filtros, decidió llamarlo. "Un amigo de la familia que tenemos en común, que además jugaba con él al baloncesto, me dio el teléfono y lo llamé. Al no conocer mi número no me lo cogió, pero le escribí un WhatsApp y enseguida me contestó", rememoraba con emoción.

Tras charlar un rato con el Ministro y mostrarle su interés en conocerle, Puente la emplazó a encontrarse con él en la Casa Colón cuando vino en enero. "Pasé una velada encantadora. Él y su jefa de Gabinete me trataron muy bien y me hicieron sentir como en casa. Aproveché para felicitarle por su gestión y para decirle que lo veía una persona muy honrada". Pero no solo tuvo tiempo para eso. "También le conté que vivo sola en Huelva y que únicamente veo a mis dos hijas que residen fuera durante el fin de semana, ya que una trabaja en Madrid y la otra en Sevilla. En concreto, le hice saber que la de Madrid llegaba a veces a la una de la noche. ¡Tardísimo! Y todo por la falta de infraestructuras y del AVE. Tan aparatoso se le hacen los viajes que a veces le pido que no venga a visitarme porque prefiero quedarme sola antes de que llegue tan cansada después de largas horas en el tren", cuenta. Y así, sin ella saberlo, le mostró con su historia al propio Ministro la importancia vital de la alta velocidad para Huelva y su gente.

Y llegó la sorpresa el 19 de marzo

Desde su encuentro en la ciudad hace dos meses, Concha y Óscar Puente se han seguido "wasapeando" con cierta frecuencia. Lo que no se esperaba la mujer es que el pasado 19 de marzo iba a recibir un regalo de cumpleaños que supondría el principio de una nueva era para Huelva. "Sonó el timbre y era la jefa de Gabinete de Puente con una tarta enorme de un AVE en los brazos. No daba crédito. Y menos cuando me explicaron que justo ayer habían publicado en el BOE la licitación del proyecto de la alta velocidad que uniría Huelva con Sevilla en menos de media hora. Qué alegría", señalaba.

"La tarta estaba buenísima, partí un trozo y se lo mandé al Ministro. Ya solo me queda un pedacito que será para mi hija", confiesa. A pesar del heroico gesto y de la entrañable historia que, sin duda, "guardará siempre en el corazón", la onubense asegura que "Yo no he hecho nada. Lo del AVE lo han hecho las autoridades, la alcaldesa, Pilar Miranda, la plataforma y los ciudadanos. Yo solo he intentado poner un pequeño granito de arena. No he puesto más".

Sin embargo, se siente feliz de que con este simbólico gesto los onubenses tengan más cerca una infraestructura que llevan reclamando años, "aunque yo no lo vea, porque tengo ya 86 años, al menos mis hijos podrán disfrutarlo", confiesa.

Ahora, dice, "voy a estar pendiente de que se cumpla. Además, yo sigo en contacto con él y estaré vigilante para que se den todos los pasos", revela con un gesto de cariño y picardía Concha, que se considera "más de Huelva que un choco".

"Yo soy muy onubense, me gusta y me duele mi tierra", confiesa."A mí me gustaría que Huelva hubiera tenido un puerto marítimo. Y me hubiese gustado que los edificios antiguos se hubieran respetado. Porque Huelva tiene muchas cosas, tiene mucha tradición, como sus restos tartésicos que deberían ponerse más en valor", cuenta con un pellizco en el alma.

Sin embargo, celebra que a sus 86 años no le quede ningún sueño por cumplir y sí mucha vida -espera- por disfrutar. "Ayer la peluquera me preguntó que cuál era el secreto de mi eterna juventud. Me pidió la receta y yo encantada se la di. Tengo muchas ganas de vivir y tengo mucha fe en Dios. Ni uso cremas ni me maquillo".

Concha seguirá disfrutando de los paseos diarios por la Plaza de las Monjas, -"su rincón favorito en el mundo"-, de sus "papas con choco", un plato que adora y quien sabe, si incluso algún día, pueda ver con sus propios ojos el hito al que contribuyó, sin planearlo: el de ver el AVE llegar a su ciudad para conectarla con el mundo.