La familia del fallecido en el primer tiroteo de El Torrejón, a la salida del juzgado este martes.
La familia del fallecido en el primer tiroteo de El Torrejón, a la salida del juzgado este martes. / Huelva Información

Huelva/El Juzgado de Instrucción 5 de Huelva continúa este miércoles tomando declaración a familiares y vecinos en relación con el tiroteo del pasado 10 de septiembre en la barriada de El Torrejón, que se saldó con un muerto y dos heridos, en el marco de una reyerta entre dos familias, y los dos posteriores registrados en los últimos días consecuencia del primero.

Así lo confirmó la subdelegada del Gobierno en Huelva, María José Rico, en un audio remitido a los medios de comunicación, en el que expresó "una llamada a la calma, a la tranquilidad no sólo para todas las personas que viven en la barriada de El Torrejón, sino también para toda la ciudadanía de Huelva, en el sentido de que la investigación está abierta y los dispositivos policiales plenamente desplegados".

Entre ellos, la Unidad de Prevención y Reacción que está "permanentemente realizando una labor concienzuda, además, de control y mantenimiento del orden y de seguridad en ese barrio", según Rico. "Creo que estas dos líneas abiertas, tanto la de investigación en sede judicial como los dispositivos desplegados en la zona nos tienen que llamar a la tranquilidad, en el sentido de dejar trabajar y continuar con los trabajos de investigación para llegar al esclarecimiento final de todos los hechos", dijo.

El desencadenante de esta serie de incidentes -el último de ellos tuvo lugar en la madrugada del pasado lunes, sin heridos- de produjo el pasado 10 de septiembre en la Plaza Violeta, cuando en el marco de una reyerta entre dos familias del barrio, se registró un primer tiroteo que acabó con un muerto y dos heridos, siendo el fallecido y uno de los segundos hermanos. Un mes más tarde fue detenido en Gijón el autor de los disparos, quien permanece ingresado en la prisión provincial de Asturias.

Pese a los intentos de la Policía de llamar a la tranquilidad y de evitar nuevos incidentes, el pasado jueves dos personas dispararon contra la fachada de la familia del detenido, recogiéndose en la zona hasta 30 casquillos de bala, y la madrugada del lunes el último de los tiroteos.

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